La Ahora Extraña Vida De Yuuji

Extraña [7]

Después de regresar de una misión individual con Gojo, Yuuji solo quería tomar un baño y descansar, pero Gojo lo detuvo en la sala con unos papeles extendidos frente a su cara.

—¿Eh? ¿Qué es esto?—

—Un boleto para ir a Sendai desde el 27 de octubre, hasta el 5 de noviembre. Volveras tranquilamente para continuar con tus clases con normalidad y las gemelas iran contigo a Sendai— Gojo lo miro con una sonrisa enorme.

—¿En serio?— No había estado en Sendai por meses.

—Si, ellas no han estado ahí antes, así que vayan a hacer turismo o algo.

—¿Y Choso? ¿Él puede venir?— Pregunto con los ojos bien abiertos.

—No, tss— Cruzo los brazos y zumbo, imitando esas alarmas de cuando alguien se equivocaba en programas de concursos —Lo vamos a necesitar aquí en caso de que las cosas se pongan mal.

—¿Qué cosa?—

—Nada de lo que tengas que preocuparte, te lo contare cuando regreses—

—Bueno, gracias por todo, Gojo-san— Yuuji le agradeció al hombre, que sonrió y le paso un brazo por los hombros y tiro de él para abrazarlo con fuerza.

—¡No necesitas preocuparte por nada, Yuuji-kun!— Le dijo con alegría sin soltarlo —Todo va a estar bien.

—¡Confió en Gojo-san!— Satoru se rio y lo apreto una vez mas antes de dejarlo ir.

—¡Diviertete mucho! Ten, llévate mi tarjeta para cualquier gasto que ocupes.

Saco su cartera y le puso una tarjeta negra en las manos, Yuuji se puso pálido y trato de regresársela.

—¡No puedo aceptar eso, Gojo-san!

—Puedes y lo haras— Le dio un par de palmaditas en el hombro —Se la daría a las gemelas, pero ellas preferirían apuñalarse antes que aceptar cualquier cosa de mi.

Bueno, no era un secreto el desagrado total que las gemelas Hasaba sentían por Gojo. Eran educadas con Nanami, cautelosas con Choso y les había llevado poco tiempo ser abiertas con Yuuji, pero odiaban a Gojo por algo que todos se habían negado a decirle. Yuuji hubiera pensado lo peor de Gojo si no fuera porque las gemelas mencionaron entre murmullos un asesinato.

—Tu trabajo es ir a Sendai, disfrutar tu tiempo y traernos recuerditos ¿Esta bien? Pon en orden cualquier asunto pendiente que tengas en Sendai, reúnete con viejos amigos y luego regresa sano y salvo ¡Asegurate de llamar a Nobara y Megumi o se pondrán inquietos!

—Esta bien, Gojo-san— Le dijo cuando finalmente lo soltó, Satoru sonrió satisfecho antes de contestar una llamada, seguramente de Ijichi. Le sacudió el cabello una vez mas y Yuuji tomo la indirecta para salir de la sala e ir a su habitación.

Entro a la habitación que ahora compartía con Choso, separados solo por un muro falso, y se sento en la cama mientras miraba la tarjeta con inquietud. La guardo en su billetera junto a los tres boletos de tren rumbo a Sendai.

Estaba emocionado de ir a Sendai, claro, era solo que... era la primera vez que iría ahí después de la muerte de su abuelo, de enterarse de esto de ser hechicero y todo lo que eso significaba.

Casi deseaba no ir.

Pero su deseo de ver a sus antiguos senpai, de visitar la tumba de su familia, de ver la casa gano sobre ese sentimiento de angustia.

—Ámam— La maldición del gusano hablo y Yuuji le acaricio desinteresadamente la cabeza, Yuji se la quito de encima y la dejo en su lugar, la criatura se quejo antes de volver a acomodarse en el cojín que Yuuji le había puesto a lado de su cama para que se acurrucara, porque la cosa se negaba a estar demasiado lejos de él.