flowers | JenLisa

4

Los días siguientes a su confesión fueron una mezcla de descubrimiento y alegría para Lisa y Jennie. Ahora que sus sentimientos eran conocidos y correspondidos, cada día traía nuevas oportunidades para conocerse mejor y compartir momentos especiales.

Una tarde, después de clases, Jennie sugirió que fueran a un café cercano. Era un lugar acogedor y tranquilo, perfecto para hablar sin interrupciones. Sentadas junto a la ventana, con sus bebidas frente a ellas, Jennie tomó la mano de Lisa y la miró con una sonrisa.

"¿Sabes? Siempre quise agradecerte por las flores de una manera más personal," dijo Jennie, sus ojos brillando con afecto.

Lisa sonrió, apretando suavemente la mano de Jennie. "Tú ya lo has hecho solo con aceptarme. Pero estoy feliz de que podamos tener estos momentos juntas."

Jennie asintió, tomando un sorbo de su café. "Siempre pensé que sería alguien completamente diferente. Nunca imaginé que sería alguien tan cercano, y mucho menos tú, Lisa. Pero estoy tan feliz de que seas tú."

Lisa se sonrojó levemente. "Tampoco fue fácil para mí mantenerlo en secreto. Cada vez que te veía sonreír con las flores, sentía una mezcla de felicidad y nerviosismo."

Jennie se rió suavemente. "Bueno, ya no tienes que esconderte más. Ahora podemos disfrutar de estas pequeñas cosas juntas."

A medida que la tarde avanzaba, las dos hablaron de todo: sus sueños, sus miedos, y sus esperanzas para el futuro. La conexión entre ellas se fortalecía con cada palabra, cada risa compartida, y cada mirada sincera.

"Lisa," dijo Jennie en un momento de silencio, "me alegra tanto que hayas encontrado el valor para decírmelo. Porque gracias a eso, ahora tenemos la oportunidad de construir algo hermoso juntas."

Lisa sintió una oleada de emociones, y sus ojos se llenaron de gratitud. "Jennie, te prometo que siempre seré honesta contigo y que haré todo lo posible por hacerte feliz."

Jennie sonrió, acercándose para darle un beso suave en la mejilla. "Y yo prometo lo mismo, Lisa. Vamos a hacer esto juntas."

Con el sol poniéndose y bañando el café con una luz dorada, Lisa y Jennie sabían que estaban comenzando un nuevo capítulo en sus vidas. Un capítulo lleno de amor, confianza, y muchas más mañanas adornadas con flores y notas escritas con el corazón.