5

241 43 0
                                    

Con el paso de las semanas, la relación entre Lisa y Jennie se hizo más fuerte y sólida. Sus amigos comenzaron a notar el cambio en ellas, cómo sus miradas se encontraban con más frecuencia y la forma en que sonreían más a menudo. Sin embargo, la mayoría de sus compañeros aún desconocían la verdadera naturaleza de su relación.

Una tarde, después de clases, Lisa y Jennie decidieron ir a un parque cercano. Era un lugar tranquilo, rodeado de árboles frondosos y caminos serpenteantes. Se sentaron en un banco bajo un gran roble, disfrutando de la compañía mutua y del suave murmullo de las hojas movidas por el viento.

"¿Sabes?" dijo Jennie, rompiendo el silencio con una voz suave, "a veces aún no puedo creer que todo esto sea real. Que tú y yo estemos juntas de esta manera."

Lisa sonrió, mirando a Jennie con ternura. "Para mí también es como un sueño. Pero es el mejor sueño que podría haber tenido."

Jennie tomó la mano de Lisa, entrelazando sus dedos. "He estado pensando," dijo con una mirada seria, "quizás deberíamos contarle a nuestros amigos. No quiero que esto siga siendo un secreto. Quiero que todos sepan lo felices que somos juntas."

Lisa asintió, entendiendo la preocupación de Jennie. "Yo también lo he estado pensando. No quiero esconderme más. Creo que es hora de ser sinceras con ellos."

Al día siguiente, durante el almuerzo, Lisa y Jennie se acercaron a su grupo de amigos, Jisoo y Rosé. Se sentaron con ellas, ambas sintiendo una mezcla de nerviosismo y determinación.

"Chicas, tenemos algo que contarles," comenzó Jennie, mirando a Lisa en busca de apoyo. Lisa le devolvió una sonrisa alentadora y continuó. "Jennie y yo... estamos juntas. Somos pareja."

Hubo un momento de silencio, seguido de una gran sonrisa en el rostro de Rosé. "¡Sabía que había algo entre ustedes! ¡Siempre lo supe!" exclamó con entusiasmo.

Jisoo, siempre la más pragmática, también sonrió. "Me alegra que lo hayan compartido con nosotras. Creo que hacen una pareja hermosa."

Lisa y Jennie sintieron una ola de alivio y felicidad al ver la aceptación y el apoyo de sus amigas. Saber que no tenían que esconderse más les dio una nueva sensación de libertad.

En los días siguientes, la noticia de su relación se fue extendiendo poco a poco entre sus compañeros de clase. Aunque algunos se mostraron sorprendidos, la mayoría aceptó la noticia con naturalidad. Lisa y Jennie comenzaron a mostrarse más abiertamente, caminando juntas de la mano, compartiendo sonrisas y risas, y disfrutando de cada momento sin temor.

Una tarde, mientras paseaban por el mismo parque donde habían decidido contarle a sus amigos, Jennie se detuvo y miró a Lisa con una sonrisa radiante. "Gracias por ser valiente conmigo," dijo.

Lisa la abrazó con ternura. "Gracias a ti por darme una oportunidad. Prometo que haré todo lo posible para que siempre seamos felices juntas."

Mientras el sol se ponía, bañándolas en una luz dorada, Lisa y Jennie supieron que, aunque el camino no siempre sería fácil, juntas podrían superar cualquier obstáculo. Su amor, que había comenzado con flores y notas, ahora florecía con una fuerza y belleza incomparables.

flowers | JenLisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora