La Oscuridad En Mi (ESP)

Capitulo 1: El sueño

Seip cerró los ojos y se sumergió en un sueño profundo. Sin embargo, su mente no descansaba. Se encontró en un bosque denso y oscuro, rodeado de árboles que parecían tocar el cielo. Un sendero serpenteante se extendía frente a él, invitándolo a adentrarse en su densidad.

Mientras caminaba, una figura emergió de la niebla. Era un hombre alto y delgado, con la cara oculta detrás de una capucha. Seip no lograba reconocerlo, pero había algo en su presencia que le resultaba inquietante.

El hombre se acercó y, sin mediar palabra, puso su mano en la cara de Seip y le dijo. "Lo siento", con una voz apenas audible.

De repente, la mente de Seip se inundó de imágenes fragmentadas. Vio un auto en llamas, con las llamas devorando el metal y el vidrio. Luego, vio a una persona tendida en el suelo, con un disparo en el pecho. El rostro de la víctima estaba distorsionada por el dolor y el miedo.

Seip se despertó bruscamente, con el corazón latiendo a toda velocidad. Estaba sudando y su respiración era agitada. Se incorporó en la cama y miró alrededor, tratando de ubicarse. Había sido solo un sueño, se dijo. Pero la sensación de inquietud persistía.

La habitación estaba sumida en la oscuridad, la luz tenue de la noche se colaba por la ventana. De repente, el sonido de su teléfono lo sobresaltó. Seip se frotó los ojos, aún somnoliento, y contestó la llamada.

-¡Hola! - dijo una voz familiar al otro lado de la línea.

- Tadashi, ¿qué onda? ¿Por qué me llamas tan temprano? - preguntó Seip, aún con la voz soñolienta.

- ¿Temprano? - se rió Tadashi. - Son las 20:34 pm, ¿¡estás loco!?

Seip se levantó de un salto y miró su teléfono para verificar la hora. La sorpresa se reflejó en su rostro al ver que efectivamente eran las 20:34.

- Jajaja, recién te despertaste, ¿verdad? - se burló Tadashi.

Seip gruñó, aún desorientado.

- Sí, algo así. Ya voy para allá, dame un rato.

- ¡Vale! No te demores, y ponte algo presentable, te voy a presentar a una amiga del trabajo.

Seip cortó la llamada y vio a su mascota, Luna, que lo miraba con curiosidad.

- Hola, Luna ¿como dormiste hoy?. Tengo que salir un rato, asi que nos vemos más tarde.

Después de bañarse y cambiarse, Seip se despidió de su abuelo, la unica persona con quien vive, y salió de la casa. La noche prometía ser interesante.

Dos hombres de aspecto misterioso caminaban por las calles de la ciudad, siguiendo las indicaciones que habían recibido. Llegaron al punto de encuentro y se comunicaron con su superior, Makoto, quien les envió una imagen de la persona que estaban buscando. La imagen mostraba a un joven de cabello blanco y ojos expresivos, llamado Seip.

Mientras tanto, Seip llegaba al bar donde había quedado con su amigo. Al entrar, vio que Tadashi estaba solo, asi que lo saludo y le preguntó si la chica que había prometido presentarle llegaría pronto. Tadashi le aseguró que sí, pero que tendrían que esperar un poco más.

Seip se sentó en la barra y Tadashi le preguntó sobre sus vacaciones. Seip respondió que estaba disfrutando de ellas, ya que no tenía que soportar a los compañeros de trabajo que lo molestaban por ser extranjero y podía dedicar tiempo a sus hobbies. Tadashi se alegró por su amigo y le palmeó la espalda, diciéndole que deberían salir más seguido.

Justo en ese momento, la mesera se acercó a tomar su pedido y la puerta del bar se abrió. Seip se dio vuelta y se quedó sorprendido al ver que la chica que había llegado era una vieja amiga de la infancia.