La Oscuridad En Mi (ESP)

Capitulo 5: Confrontación

La advertencia de Carlo resonó en el aire: "No hagas nada estúpido, Seip". La voz firme y autoritaria dejó claro que no había margen para errores. Seip, confundido y asustado, preguntó: "¿Qué buscan de mí? ¿Por qué me atacaron así?"

La respuesta de Carlo fue un lamento. "No puedo hablar de eso, Lo siento". La voz de Carlo estaba llena de remordimiento, como si estuviera atrapado en una situación que no podía controlar.

Renji toma una piedra del suelo y se la entrega a Carlo. La transformación fue rápida y sorprendente. Carlo convirtió la piedra en una espada afilada, que sostenía con una mano firme.

"Espero que no mueras", dijo Carlo, mientras miraba fijamente a Seip. La espada parecía brillar en la luz del sol, como si estuviera lista para cortar el destino de Seip.

Seip retrocedió, asustado, sin creer lo que estaba viendo. Mientras Carlo se acercaba a él con la espada en alto. "¿Qué diablos quieren de mí?" gritó Seip, intentando esquivar el ataque. "¡Detente! ¡Haré lo que sea!"

Pero Carlo ataco sin piedad, su espada cortaba el aire con un silbido mortal. Seip esquivó varios espadazos, preguntándose cómo había hecho Carlo para crear una espada de piedra. "¿Cómo es posible?" se preguntó, asustado.

La lucha continuó durante varios minutos, seip esquivando y retrocediendo mientras Carlo atacaba con furia. Pero finalmente, Seip cayó al piso, exhausto y derrotado. Carlo se acercó a él listo para dar el golpe final.

"Por favor, espero que realmente seas tú", dijo Carlo, su voz llena de duda. Victor levantó su mano para defenderse, pero Carlo la cortó con un golpe preciso.

Sin embargo, algo extraño sucedió. Algo salió de la muñeca de Seip y volvió a unirla a su mano, como si la herida se hubiera curado milagrosamente. Carlo y Renji quedaron sorprendidos, sin saber qué hacer.

"Eso no es lo que Makoto nos dijo", dijo Renji, con una voz llena de confusión. Carlo respondió: "Tendré que seguir hasta que demuestre ser quien buscamos".

El rostro de Seip reflejaba una mezcla de sorpresa y terror mientras intentaba comprender lo que acababa de suceder. "¿Tengo... poderes?" se preguntó, su mente llena de dudas y temores. "¿Desde cuándo se supone que tengo esto?"

Cuando Carlo se acercó a él con la espada preparada para atacar, Seip levantó nuevamente su mano en un gesto desesperado. "Por favor, paren", suplicó Seip, pero Carlo no se detuvo.
Renji gritó advirtiendo a Carlo, pero fue demasiado tarde. De la mano de Seip brotó una llamarada de fuego que envolvió la mano de Carlo, provocando quemaduras de tercer grado.

Carlo gritó de dolor mientras Renji corría a su lado para curar su herida. Seip, aún asustado, miró su mano con incredulidad. "¿Qué demonios es lo que pasa?" se preguntó, sin saber si estaba despierto o si todo era solo un sueño.

"No puedo creer que algo así esté pasando", pensó, intentando mantener la calma. "Ya tendré tiempo para pensar sobre esto, ahora debo salir vivo de esta". Seip se dio cuenta de que podía utilizar el fuego que salía de su mano para escapar y no terminar muerto.

Con determinación, se puso de pie y miró a Carlo y Renji, que lo observaban con una mezcla de sorpresa y miedo. Las llamas de fuego seguían saliendo de su mano, como si estuvieran vivas. Y en ese momento, algo aún más extraño sucedió: comenzaron a salir llamas de fuego por sus pupilas, como si su propio cuerpo estuviera ardiendo por dentro.