Evangelion: toda la libertad del mundo

Capítulo 9: Asuka

Capítulo 9: Asuka
Burbujas de aire flotaron hacia arriba en el LCL mientras Asuka exhalaba un suspiro. Al menos ella estaba nuevamente en la Unidad 02: su Evangelion. El único lugar donde nadie podría tocarla. Siempre se había sentido segura aquí. No importa lo que los instructores le gritarían, no importa qué nuevo tutor la esperaría en casa, diablos, no importa dónde viviría este año o mes… nada de eso podría alcanzarla en su enchufe de entrada. La lección que Asuka había aprendido de sus catorce años de vida era que la gente apestaba, que cada uno sólo velaba por sus propios intereses, que la gente sólo se exigía unos a otros: "¡Protégeme!", "¡Lucha por mí!", "¡Sufre por mí!". Pero aquí en su Evangelion estaba a salvo de todos ellos.

Es más, el Evangelion era tal vez lo único que tenía para ella. Un vehículo de combate de 80 metros de varios miles de toneladas, y era suyo. No importaba a dónde se mudara, no importaba lo que le consiguieran o lo que le quitaran, ella siempre había tenido esta unidad. Nadie más lo había usado nunca y ella nunca había usado otra unidad. Ella era la piloto de la Unidad 02. Nadie podría quitarle eso.

Así que al menos había eso. Sin embargo, en general, ella no quería estar allí, en los bosques a unos treinta o cincuenta kilómetros al norte de Tokio-3. Quería estar en casa y jugar videojuegos... o tal vez jugar videojuegos con Kensuke. Ya era bastante malo tener que ir a la escuela todos los días, pero hoy, Misato la había recogido después, y Mari también. Ni siquiera era una prueba de sincronización regular, era algún ejercicio especial de mierda que consumía su tiempo libre y, como de costumbre, ni siquiera había recibido ningún aviso previo.

Quizás, antes de venir a Japón, habría estado más entusiasmada con un ejercicio de entrenamiento contra otro Evangelion, probando nuevos prototipos de armas. Pero parecía que a nadie aquí le importaba que ella piloteara, que los estuviera salvando a todos, así que ¿por qué debería importarle? Era algo que había hecho toda su vida, y si le dijeran que tenía entrenamiento adicional lo haría, pero… en este momento, no se sentía muy entusiasmada con eso.

Oh bien. Al menos podría golpear a ese engreído cuatro ojos en la cara.

Podía ver los bosques a su alrededor, como si estuviera en una cabina totalmente transparente. Incluso los árboles más grandes sólo llegaban hasta "su" cintura. Aun así, pocos verían este ejercicio: se trataba de una zona montañosa sin asentamientos humanos en varios kilómetros a la redonda. Lo cual, para un país densamente poblado como Japón, hacía que esto estuviera en medio de la nada.

Actualmente, ella estaba parada en un claro... más o menos. Básicamente, los pies de su EVA llenaron por completo un claro. Frente a ella, más adentro del bosque, podía ver la pintura azul y la cara ciclópea de la Unidad 00. Había algo en los hombros del Evangelion contrario, y también algo en el brazo izquierdo, y en su mano derecha sostenía un palo. con una gran cadena de escala de EVA adjunta: una estrella de la mañana.

EVA-02 tenía algo en los hombros y también en el brazo izquierdo. Mientras tanto, Asuka no tenía muy claro qué tenía en su mano derecha.

"Muy bien, señoras." Esta era Misato por las comunicaciones. La recién nombrada Coronel estaba en uno de los camiones de comando de alta tecnología de NERV, que había sido estacionado a una distancia segura, para garantizar que ella y los 'conejitos del puente' no fueran pisoteados accidentalmente durante la pelea. Que Asuka y Mari seguramente tendrían algunos moretones, eso aparentemente se consideraba aceptable. "¡He venido con algunos regalos sorpresa para ti!"

Asuka hizo una mueca. De hecho, sería propio del Coronel considerar más herramientas para que Asuka hiciera su trabajo como 'regalos'. Era otra cosa que probablemente no le habría molestado hace un año; ella incluso habría estado de acuerdo en ese entonces. Pero ahora…