LA VERDAD OCULTA

Capítulo 8

Después de que el médico confirmó la noticia de su embarazo, Mera se sintió abrumada

— ¿Está usted seguro? — preguntó, buscando una confirmación adicional, como si esperara que el diagnóstico pudiera ser un error

El sanador asintió con seriedad

 — Absolutamente, Majestad. Los resultados del exámen son claros. Está embarazada

Mera apretó los puños, no podía evitar pensar en las implicaciones que esto tendría para su vida, para Atlantis y para su relación con Diana. Algo dentro de ella seguía resistiéndose a aceptar la realidad tan rápidamente

— Por favor... vuelva a hacer los exámenes. No puede ser cierto — suplicó con la voz quebrada 

— Majestad, comprendo su incredulidad. Pero le aseguro que los procedimientos y equipos que utilizamos son altamente precisos. No hay necesidad de repetir los exámenes. Los resultados son concluyentes

— Soy la Reina y si le pido que repita los exámenes, usted lo hará — su voz resonó en la habitación  

El medico se quedó sorprendido ante las palabras de su reina, y a pesar de que había confianza en los resultados iniciales, la reina había hablado con una autoridad que no podía ignorar

— Entiendo, Majestad. Haré todo lo posible para proporcionarle la tranquilidad que necesita —respondió ante la solicitud de Mera

Él procedió a realizar nuevamente las pruebas. Realizó pruebas de sangre para analizar los niveles hormonales, exámenes de orina para confirmar cualquier indicio adicional, y realizó otro ultrasonido para verificar la presencia del feto y su desarrollo

Mera observaba con ojo de halcón cada paso del proceso, ella misma había hecho algunos cursos de medicina, por lo que no entendía como es que pudo haber pasado sus síntomas por alto

Después de completar todas las pruebas adicionales, el sanador revisó minuciosamente los resultados. Tomó un momento para asegurarse de que cada detalle estuviera en orden antes de dirigirse nuevamente hacia Mera

— Majestad, he repetido todas las pruebas como usted solicitó. Los resultados confirman nuevamente que está embarazada — anunció con calma

Mera se mordió el labio inferior con fuerza, en un intento de aguantar las ganas de llorar, se veía desolada en lugar de feliz 

Finalmente, reunió el coraje para hacer la pregunta que le pesaba en el corazón

— Pero... ¿cuánto tiempo tengo? — susurró, sintiendo un nudo en la garganta

Él consultó sus notas y luego la miró directamente

 — Según la información, sus semanas de embarazo coinciden con la fecha en la que usted se marchó hacia Themyscira 

Finalmente la pelirroja no pudo contener su llanto y comenzó a llorar, no pasó mucho antes de que sus guardias irrumpieran en la habitación con brusquedad 

— ¿Esta bien su majestad? — preguntó la Amazona mientras se acercaba rápidamente a ella 

Mera ni si quiera fue capaz de responder, por lo que en menos de lo que el médico pudo procesar, se encontraba siendo rodeado por espadas, lanzas y tridentes 

— ¿Qué le dijo? — exigió un guardia Xebeliano

— Que estaba embarazada — alcanzó a responder, estaba sorprendido por la repentina agresividad 

Las miradas entre los guardias se cruzaron, ninguno sabía que decir o que hacer 

Mera se pasó una mano temblorosa por el rostro, tratando de mantener la compostura