Soy La Mascota De La Princesa

Capítulo 8: La Magia

Habían pasado varios meses desde que la familia de Eliza me acogió en su hogar. Me había adaptado a la vida con ellos y disfrutaba de la compañía de Clara y Lily. Era una vida sencilla pero llena de momentos felices. Sin embargo, mi curiosidad sobre el mundo más allá de nuestro pequeño pueblo seguía creciendo.

Un día, mientras caminaba con Lily por el mercado, nos detuvimos a observar a unos jóvenes que parecían estar en medio de una discusión acalorada. Lily y yo al principio los intentamos ignorar pero la situación se volvió violenta. Uno de los jóvenes levantó la mano y de sus dedos salió una chispa de luz que se transformó en una bola de fuego, lanzándola hacia su oponente.

Me quedé paralizada, fascinada por lo que acababa de presenciar. La magia era algo que sabía que existía pero al estar lejos de gente y solo estar rodeada de lobos nunca la presencie y ahora poder ver su poder en acción me dejó asombrada. Recordé que, desde que llegué a este mundo, me había enfocado en sobrevivir usando mis habilidades físicas y mi instinto, olvidando por completo el potencial de la magia.

Lucy:Lily, ¿viste eso? -pregunté, todavía en shock-. ¡Usaron magia!

Lily asintió, y miró la escena con desinterés, alparecer esta era una escena normal para ella

Lily: Sí, algunos en el pueblo pueden usar magia -dijo-. Mi mamá me contó que hay una escuela de magia en la ciudad, pero es muy cara. Solo los ricos pueden permitírsela. Así que velo olvidando por qué no te pagaran la matricula

La idea de aprender magia me emocionó aunque como casi siempre Lily fue un pocogrosera. Pero aun asi quería saber más sobre este poder y cómo podría usarlo. Al llegar a casa, no pude esperar más y pregunté a Eliza y Thomas sobre la escuela de magia.

Lucy: Eliza, Thomas, hoy vi a unos chicos usando magia en el mercado -dije, con entusiasmo-. Lily me contó que hay una escuela de magia en la ciudad. ¿Es cierto?

Eliza asintió, sonriendo ante mi curiosidad.

Eliza: Sí, es cierto -respondió-. La Academia de Magia Lavalier es famosa en todo el reino. Pero la matrícula es muy costosa, y solo las familias adineradas pueden permitírselo simples comerciantes como nosotros no podemos darnos ese lujo

Lucy: ¿Hay alguna otra forma de aprender magia? -pregunté, con la esperanza de encontrar una alternativa.

Thomas, que había estado escuchando en silencio, intervino.

Thomas: Bueno, hay algunos magos que enseñan a aprendices, pero encontrar a uno dispuesto a aceptar a alguien sin experiencia es difícil -dijo-. Otra opción sería convertirte en aventurera. Los aventureros ganan buen dinero y, si tienes éxito, podrías ahorrar suficiente para pagar la matrícula de la academia.

Luego de decir eso recibió un golpe de Eliza al parecer no le gustó que el me mencionara lo de ser aventurera

Pero la idea de convertirme en aventurera ya se me habia grabado y despertó algo dentro de mí. Había vivido en el bosque y había luchado contra goblins, osos, serpientes, etc, tenía las habilidades necesarias para sobrevivir. Pero ser aventurera no solo significaba luchar, también implicaba explorar, aprender y crecer.

Lucy: Tal vez debería intentarlo -dije, más para mí misma que para los demás-. Podría convertirme en aventurera, ganar dinero y aprender sobre magia en el proceso.

Eliza y Thomas se miraron, una mezcla de preocupación

Lucy: Si eso es lo que deseas, te apoyaremos -dijo Eliza, con una sonrisa cálida pero con una mirada preocupada-. Pero ten cuidado. Ser aventurera puede ser peligroso.

Clara y Lily, que habían estado escuchando en silencio, se acercaron.

Clara: Lucy serás una gran aventurera -dijo Clara, con una sonrisa animada-. Y cuando aprendas magia, nos enseñarás un poco, ¿verdad?

Lily asintió al parecer aprender magia si le entusiasma un poco.

Lily: esfuérzate por no morir lobita, no se que aria sin mi mascota-dijo con broma palmado mi cabeza

Lucy:No moriré al menos que me corten el cuello‐dije con un ligero puchero- y no soy tu mascota

Lily:si,si como digas, -me dio una sonrisa- se que seras una aventurera muy buena

Su confianza en mí me llenó de determinación. Sabía que el camino sería difícil, pero estaba lista para enfrentar cualquier desafío.

Esa noche, mientras me preparaba para dormir, pensé en los pasos que debía seguir. Primero, necesitaría registrarme como aventurera en el gremio local. Luego, comenzaría a aceptar misiones y trabajos para ganar dinero y experiencia. Con el tiempo, podría ahorrar lo suficiente para pagar la matrícula en la Academia de Magia de Lavalier

Lucy:Mamá, papá, Yuki, Gise, Tom, Luka, Nico, voy a convertirme en una aventura, luego aprenderé magia, donde sea que estén espero me apoyen -murmuré mientras miraba las estrellas- Auuuuu, auuuu auuuu -aulle a la luna, pero como era obvio no recibía respuesta-

Lily: Quieres callarte ?!!!

Lucy: ups -me volvi a mi cuarto y decidí dormir un poco-

El viaje que tenía por delante era incierto, pero por primera vez en mucho tiempo, me sentía emocionada por el futuro. Con la bendición de mi nueva familia y la determinación en mi corazón, me preparé para enfrentar cualquier desafío que viniera.

La mañana siguiente, me levanté temprano y me dirigí al gremio de aventureros. Era un edificio robusto en el centro del pueblo, con un letrero que mostraba una espada cruzada con una varita mágica

Lucy: que cliché, no se porque esperaba algo más

Al entrar, sentí una mezcla de nerviosismo y emoción.

El recepcionista, un hombre de mediana edad con una cicatriz en el rostro, me saludó con una sonrisa.

???:Bienvenida al gremio de aventureros -dijo-. ¿Qué puedo hacer por ti?

Respiré hondo y di un paso adelante.

Lucy:Quiero registrarme como aventurera -dije, con determinación.

El hombre asintió y me entregó un formulario para llenar. Después de completar los datos básicos, me explicó los requisitos y las normas del gremio. Una vez terminado el proceso, me entregó una insignia de aventurera y me deseó suerte.

Con mi insignia en mano, salí del gremio sintiendo que un nuevo capítulo en mi vida estaba a punto de comenzar. Estaba lista para enfrentar los desafíos, ganar experiencia y, algún día, dominar la magia.