cuando salga el sol-Richard Rios

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— Solo te pasa a ti esto Madison —ríe sin parar cuando de repente nos abre la puerta un chico en toalla, alto de 1.85 mas o menos, con tatuajes en sus brazos, pecho y cuello que nos empieza hablar en portugués

— Soy española es que no me entero de nada — le expliqué avergonzada por lo que acababa de pasar

— Decía que no se preocupen que en realidad el que no debía estar aquí soy yo.

Espérate, ¿habla español? ¿y du acento? pensaba que iba a ser más difícil

— Igualmente disculpa a mi hermana, eso le pasa por chismosa —responde maxi

—Pero serás sin vergüenza, fuiste tú el que estaba todo el rato insistiendo en ver el vestuario —respondí alterada mientras una chica salió del vestuario con la cabeza agachada

ay mierda, esto va de mal en peor

— ¿Entienden porque dije que yo tampoco podía estar? — rió el chico mientras ponía su mano en la frente. — Hagamos un trato, yo no los vi a ustedes ni ustedes a mí

No estaba prestando atención, solo le miraba el abdomen hasta que mi hermano me dio un pequeño empujón para que reaccionara

— ¿Qué? ah, si, si claro por supuesto

El chaval puso una sonrisa coqueta, creo que me había pillado

— Por cierto, soy Richard, Richard Rios — le extiende la mano a maxi mientras el le responde.
— ¿y cuál es su nombre? —se dirige a mi

— Madison Bacandi

Me agarra la mano para darme un beso

— Mucho gusto, ¿italiana, no? lo digo por el apellido

— Solo mi padre, soy española, pero sí algo de sangre tengo — respondí sin mirarle, no se pero estaba nerviosa.

— Da gusto tener a gente que hable español, yo soy colombiano, pero bueno, no es momento de hablar.
Con permiso iré a cambiarme, si quieren ver el vestuario les recomiendo otro momento — bromeó

— Sin problema, ademas ya sabemos que mejor no ir donde no nos permiten — respondió maxi entre risas

Richard cerró la puerta y nosotros nos fuimos por dónde vinimos sin ningún tipo de ganas de experimentar mucho

— Que está pensando esa cabecita loca — dice maxi

— No, nada — negué.

el me miró sin creérselo

— Pues como que es guapo ¿no? — solté poniéndome roja y él solo reía

— Papá te mataría pero yo quiero un cuñado con el que jugar a fútbol

— Cállate, solo me pareció guapo — encogí los hombros

20:40 p.m

Después de pasarnos toda la tarde en la zona vip tan solo quedaban 20 minutos para el partido cuando me llega una notificación

richardrios.m ha comenzado a seguirte

me metí para seguirle de vuelta y veo que me había mandado un DM

apagué mi teléfono, ahora si nerviosa y me levanté para ya dirigirme a las gradas como teníamos previsto.

Me senté junto a mi hermano y por primera vez en mucho tiempo me puse a prestar atención en un partido

— Madison — dijo maxi y le miré. — ¿esa no es la chica que salió del baño?

Rápidamente mire donde estaba señalando con la cabeza y sí era ella, una chica rubia bastante guapa sentada en las gradas apenas unas filas más abajo nuestra con una camiseta suya.

— Serán novios digo yo — le respondí

— Pues ha durado poco el romance —bromea maxi pero no me reí

ósea romance ninguno, pero que me pareciese guapo y que se me acabase de joder la oportunidad pues si.

El partido terminó ganando palmeiras 2-0 y mientras todos festejaban, incluida yo, me fije en si Richard se iba a dirigir hacia la chica rubia ya que lo veía como buscando algo entre la multitud, pero para mi sorpresa me miró a mi y me sonrió.

"si me diste suerte" logré entender lo que decía leyéndole los labios, yo solo sonreí y alcé el puño en señal de victoria.
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