cuando salga el sol-Richard Rios

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— Si claro dime — me respondió

— ¿y esa chica rubia?

Casi se atraganta al darle el sorbo a su copa, pegó un suspiro y empezó a reír

— Es una compañera, es fotógrafa se encarga de hacernos fotos en los partidos, somos amigos.

Obviamente sabía que se habían acostado, pero lo conocía de horas, era obvio que no me lo iba a contar.

Estuvimos toda la noche hablando, riendo y bebiendo, es más llamamos un par de veces a recepción para que nos trajera más y más champagne. Richard me caía bien, se veía amable aunque tuviera esa cara de malo, parece ser que solo era una máscara, el era más bien un osito de peluche.

06:47 a.m

Estábamos sentados en el suelo, viendo como amanecía desde el gran ventanal de la habitación, ambos borrachos riéndonos por todo y sin apenas vocalizar

— Ay no, mira que horas son — Dijo Richard levantándose rápidamente— entreno en casi seis horas y aún no he dormido

— Joder, perdona no debía haberte dicho que te quedarás — Me levanté yo también— ¿llamo a recepción para pillarte un uber?

— No, no tengo el coche aquí al lado —Respondió tambaleándose un poco

— No vas a coger el coche así, te estrellarías

— Déjame pensar, déjame pensar — se sentó en la cama y se quedó embobado mirando a un punto fijo. — ¿te importa si descanso un poco en el sofá hasta que se me pase y ya me voy al campo?

—Claro no hay problema — respondí

Richard se quitó la camisa, dejando ver esos tatuajes en el pecho y brazos, también uno enorme de un león en la espalda, ese no lo había visto antes, intenté disimular ante ese cuerpo musculado y me tumbé en mi cama

— Que descanses linda —dijo tumbándose en el sofá para caer dormido en apenas unos segundos.

11:00 a.m

Me desperté por un portazo y levanté la mirada rápidamente, era Maxi

— Maximiliano Bacandi López, haz menos ruido joder — dije susurrando para no despertar a Richard

Maxi se acercó a mi y su cara cambió derrepente

— ¿Qué coño hace Richard Rios sin camiseta durmiendo en el sofá? — Dijo sorprendido

— Después de traerme el collar estuvimos tomando algunos tragos, anda súbete a dormir que a saber que hora es y todavía estabas de fiesta

— Amo brasil Mads ¡amo brasil! — gritó

Richard se despertó y se incorporó mientras se frotaba bruscamente los ojos

— ¿Que hora es? — Dijo con voz ronca

— Las once — responde maxi— bueno, os dejo antes de que me caiga de sueño.

se dirigió hacia las escaleras que tenía la suite, la cual llegaba a una otra habitación con una cama un poco mas pequeña que la mia

Richard seguía embobado y llevándose las manos a la cabeza

— No se si es el sueño, o el Champagne ese de mierda que vaya resaca me ha dejado — dijo por fin— ¿qué hora habías dicho que era?

Agarré mi móvil y miré

— Las once

Richard se levantó rápido del sofá y empezó a buscar algo por la suite corriendo de un lado a otro

—¿ y mi camisa? — dijo mirando a todas partes

— la tienes en frente — respondí conteniéndome la risa y el se la puso rápidamente

— He pasado una muy buena noche, espero que nos veamos más a menudo — dijo mirándome con una sonrisa tímida

— lo mismo digo, suerte en el entreno — sonreí ampliamente y salió por la puerta

NARRA RICHARD:

Llegué lo más rápido posible al estadio Allianz Parque, corri a los vestuarios lo más rápido que pude y me cambié pero cuando salí a la cancha ya habían empezado.

Me metí rápido junto a mis compañeros a dar vueltas corriendo para calentar con la esperanza de que mi entrenador no se hubiese fijado de que llegaba 5 minutos tarde, pues Ferreira era muy estricto con la gente impuntual, obviamente se dió cuenta

—Rios venha aqui agora (Rios venga aqui ahora) — me gritó desde la otra punta de la cancha y me acerqué— Entendo que ontem você teve que comemorar, eu também, mas não é desculpa para chegar atrasado ao treino (entiendo que ayer tuvieseis que celebrar, yo tambien lo hice, pero no es excusa para llegar tarde a un entreno)

—Com licença Abel, prometo que não vai acontecer de novo (disculpame abel, prometo no volverá a pasar) — le respondí con la cabeza baja y volví a seguir entrenando

Agustín Giay un jugador de mi equipo se me acercó rápidamente

— Qué, ya te están jodiendo por pasar la noche con esa chica o que — bromeó el argentino

— ¿Tanto se nota? — reí

— ¿Te besaste con ella?

— Agus estas loco, no fui con esa intención —dije algo enfadado— Madison me parecía guapísima, pero yo no quería besarme con ella y mandarla a la mierda como solía hacer, quería tomarme mi tiempo de conocerla, por lo menos el tiempo que estuviese aquí

— Pero bueno, Richard Rios durmiendo en la misma cama sin acostarse con nadie ¿que tipo de logro es este? —seguía riendo

— Que aunque no me creas soy un caballero Agustín, por cierto, dormí en el sofá —recalqué eso último.

Estuvimos poniéndonos al día, el me contó también todo lo que hicieron anoche y como la mitad del equipo acabó vomitando por las esquinas.

Cuándo terminó el entrenamiento saqué mi teléfono de la mochila para escribirle a Madison a ver si estaba despierta hasta que alguien me lo arrebató de las manos

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holiiss este es el primer capítulo que hago donde narra richard, en el siguiente continúa él y vuelve a narrar Madison

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