Y aquella madrugada de agosto quise saber todo sobre ti.
Tu nombre, el color de tus ojos, tu edad, tu cantante preferido...
Empecé a sentir que anhelaba algo que jamás había echado en falta hasta ahora. Lo tenía todo, pero... ¿ Por qué quería saber de ti?
Cerré los ojos y esperé a que nuestras miradas se encontraran, porque en mis sueños, tu aún me perteneces.
ESTÁS LEYENDO
Al final solo somos uno
Teen FictionElla estaba convencida de que el amor era algo que nunca encontraría y el estaba convencido de que no abandonaría ese sentimiento. Dos polos opuestos con una misma misión: ser los mejores en su deporte. Atenea lo tenía todo planeado... pero alguien...