sieben

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Pooh no se esperaba que obedeciera enseguida, su primer pensamiento era que él mayor dudaría o se incomodaría por su petición, pero su sorpresa fue su sorpresa  más grande cuando la tibia y húmeda lengua de su novio pasó por el borde de sus labios...

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Pooh no se esperaba que obedeciera enseguida, su primer pensamiento era que
él mayor dudaría o se incomodaría por su petición, pero su sorpresa fue su sorpresa más grande cuando la tibia y húmeda lengua de su novio pasó por el borde de sus labios superior, limpiando el chocolate.

Finalmente, pavel había acunado su rostro entre sus manos y le robó un beso que acompañó con el gesto de una adorable sonrisa.

- ¿Así está mejor? - preguntó él mayor con calma, Pooh quien seguía sin poder creerlo le asintió -. Bien, creo que me llevaré esto - dijo apartándose para tomar el plato con las galletas, pero rápidamente fue arrastrado a su lugar por él menor, quien la sujetó por la cintura pegándolo peligrosamente a su cuerpo.

El corazón de Pavel se aceleró con aquella acción y posó sus pequeñas manos sobre el pecho cubierto del pelinegro

- Espera, creo que aún tengo un poco más de chocolate encima - dijo él menor, pavel alzó sus cejas y con sus ojos buscó los supuestos restos del dulce, sin embargo, no encontró nada.

- No veo nada, ¿Dónde tienes? - cuestionó con inocencia.

Pooh rió por lo bajo -. Aquí - llevó una mano hasta la nuca contraria y acercó el rostro de él mayor chocando así sus labios.

Pavel no era tonto, él se esperaba un movimiento de este estilo y aún así fue tomado por sorpresa.

De todas formas, no se iba a quejar, si su novio quería jugar un rato entonces le seguiría la corriente.

Enrolló sus brazos alrededor de su cuello y se puso de puntillas en un intento de quedar a la altura de él menor, movió su cabeza al lado contrario permitiéndose un mejor ángulo en el beso.

Pavel por un instinto dejó que el pelinegro se abriera el paso dentro de su boca, no solo eran sus labios los que habían chocado
y bailaban a la par, pues sus lenguas se encontraron en aquella pieza degustando la una de la otra e intensificando aún más el nivel de aquel cruce.

Ambos mantenían sus ojos cerrados; el subconsciente de pooh gritaba de alegría por aquella acción de él mayor y a la vez yacía en un estado de shock por la correspondencia de su intención por parte de su novio, ¿Era real todo esto? ¡Lo estaba disfrutando!

Pasados los minutos ambos se separaron con falta de aire y pulmones aclamando por ello, Pavel no perdió la vista de su pareja y pooh por su parte tampoco tenía planes de hacerlo, parpadeó rápidamente y tragó fuerte al notar los delirantes ojos de su novio, Pavel no se había despegado de su cuello y estaban tan cerca que su aliento contrario chocaba placenteramente con su rostro.

- Woah... - fue lo único que pudo decir Pooh después de aquel beso. De todos las veces que pudo compartir con pavel, este sin duda fue el más potente que ha probado - Pavel, eso fue...

- Espectacular - culminó él mencionado luego se relamió los labios observando los ajenos ansioso de volver a saborearlos.

- Oh... Dios mío, Pavel

De pronto, él tailandes mayor había posado un dedo índice sobre su boca obligándolo a callar -. ¡Shh! ¡Mira! Aún tienes chocolate, debo quitártelo - dicho esto, él mayor sonrió con malicia.

Pooh supo que aquellas palabras fueron la gota que derramó el vaso.

Candyfloss [Poohpavel]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora