𝟎𝟒

727 109 22
                                    

𝐩𝐚𝐫𝐭𝐞 𝟐/𝟑

𝐩𝐚𝐫𝐭𝐞 𝟐/𝟑

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



-¿Le guste a tu hermana? -Preguntó Satoru.

Yo asentí como respuesta.

-Es muy linda, pero honestamente no me interesa salir con nadie por el momento.

-Satoru porfavor, aunque sea solo una salida, te lo suplico. -Hablé con cierto desespero, a lo cual el no tardó en mirarme.

-¿Por qué estas tan desesperada en que salga con tu hermana? Por un momento creí que yo te gustaba. -Soltó repentinamente.

Comencé a sentir mis mejillas arder, mi lengua se había trabado para poder contestarle.

¿Era tan obvio mi amor por Satoru que hasta el mismo se dio cuenta?

Antes de poder responderle algo el se soltó a reír.

-Estoy bromeando ____, hubieras visto tu rostro. -Se burlo con una hermosa sonrisa en su rostro.

-C-Como sea... ¿Si puedes hacerme ese favor? -Cambie de tema. Era vergonzoso.

-Solo dime porque tanta insistencia...

-Verás...

Desde que tengo memoria mi madre siempre me regañaba cada que hacía llorar a Eva, aunque ella fuera la mayor yo debía de cuidarla de todo mal que le llegara a pasar, no entendía el porque de eso pero no puse ningún pero, al fin de cuentas era mi hermana y debía de preocuparme.
Cuando tuve uso de razón mi madre me explico que Eva tenía problemas en el corazón y una de ellas era el "síndrome del corazón roto" qué es cuando una persona pasa por una situación emocional intensa y ella lo justificó con la muerte de mi padre. Eva no puede llorar o tener algún tipo de rechazo qué la haga sentirse mal ya que mi madre decía que podía llegar a morir.

-¿Pero qué no eso del síndrome del "corazón rotó" solo es temporal? Aparte no se considera como una enfermedad por lo mismo que solo es temporal. -Hablo Satoru con un ceño fruncido.

-Mhm, realmente no se mucho sobre eso, mi madre lo mantiene muy en secreto ya que dice que nadie puede saberlo por lo mismo de que "podrían dañar a mi hermana." -encogi mis hombros.

-En ese caso, como sea. Dile a tu hermana que la veo el sábado el centro comercial cerca del río a las 10:00 a.m, si se pasa por un segundo me iré. -Se levantó de su lugar dándome la espalda para comenzar a caminar.

Yo solo me quede sentada, mirando como se iba, mis ojos comenzaban a picar y mi garganta comenzaba a doler. No quería que aquel acontecimiento pasará pero ya no había marcha atrás, Siempre tienes que sacrificar lo que más amas para mantener feliz a los que están contigo.

Creo que ahora yo soy la que tiene el síndrome del corazón rotó...

°°°

-¿Y que paso después? -Pregunto Nanami extendiendome un pequeño pedazo de papel.

-Al día siguiente Eva llego muy feliz, prácticamente dando saltos de alegría, lo habían pasado tan bien que Satoru le había pedido otra cita y hasta intercambiaron teléfono. -Explique, mis labios temblaban y de mis ojos no paraban de salir lágrimas al recordar ese día...

2017

-¡_______! ¡Eres la mejor hermana! -Exclamó a gritos Eva azotando la puerta de mi habitación.

Yo levante mi cabeza de la almohada solo para que pensara que le prestaba atención, sabía que ese día sería el peor de día de mi vida.

-¿Y eso? ¿Te fue bien en la salida? -Pregunte sin ánimos, el dolor en mi garganta volvió a aparecer.

Esa debería ser yo.

Yo debería ser quien llegara de aquella cita dando saltos de emoción.

Yo debería ser quien usará ese hermoso vestido azul que hacia juego con el azul de sus ojos.

-Me fue más que bien, Satoru y yo fuimos a una pequeña cafetería, estuvimos hablando mucho, tenemos tantas cosas en común.

"Que mentirosa, tu y el no son para nada compatibles" pensé.

- Después fuimos al centro de los juegos, y fue increíble, ganó un peluche para mi pero olvide pedirselo y se lo llevo. Y me pidió otra salida el próximo sábado, ¿No es increíble? hubo un momento en el que nuestras manos se entrelazaron mientras estábamos en los juegos. Creo que estoy enamorada.

Eso último me había caído como un balde de agua helada sobre mi cabeza, ¿Satoru se sentirá igual que Eva?

Antes de que pudiera responderle algo, el timbre del porche sonó.

-Debe ser Satoru Iré a abrir-

-Tranquila, llame a Suguru para que viniera así que debe ser el. Si es Satoru te llamaré. -Mentí, era obvio que era Satoru pero necesitaba hablar con el.

Eva solo asintió y salió de la habitación dando saltos y taradeando una canción.

Antes de abrir la puerta, cerré los ojos para no dejar salir las lágrimas que amenazaban por hacerlo, di un largo suspiro y abrí la puerta con mis manos temblorosas y sudorosas por el nervio.

Y al abrirla lo vi, tan lindo con aquella hermosa camisa de botones, su pantalón bien planchado de color negro y sus zapatos tan brillosos como sus ojos. Cuando salía conmigo solo usaba jeans o shorts deportivos y tennis.

En cuanto me vio su sonrisa de había borrado y escondió rápidamente aquel peluche.

-¿Qué necesitas Gojo? -Pregunte con mi voz temblorosa, me había dolido su cambio de emociones.

-¿Gojo? ¿Estas molesta? Como sea, ¿Podrías hablarle a Eva? porfavor Yamagawa. -Hablo con sarcasmo, o eso quería creer yo.

Antes de que el pudiera ver dentro de mi hogar, lo arrastre hasta el porche.

Mi rostro miraba el suelo, no podía siquiera mirarlo a los ojos porque se que comenzaría a llorar.
Satoru solo estaba ahí parado, aquel peluche yacía frente a mi pegado a su pecho.

-¿Te enamoraste de Eva? -Pregunte sin más.

Su silencio me hacia morir por dentro, conocía a Satoru y se que el no se enamora demasiado rápido, tiene un ego tan grande que eso no le permite tener sentimientos la primera vez.

-¿Y si así fue qué?-Dijo sin más.


"Tal vez no lo conocía del todo bien."

𝐄𝐯𝐚 || 𝐆𝐨𝐣𝐨 𝐒𝐚𝐭𝐨𝐫𝐮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora