Capítulo1: «El Trato Con Dalton»

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💙

Corría — como cada mañana desde que entre a mi ultimo año  — hacia el instituto junto a Omar porque nos quedamos dormidos por andar diciendo cinco minutos más a cada rato. A penas y nos despertamos bien, nos vestimos decentes, tomamos las maletas y corrimos como si no hubiera un mañana. Íbamos con toda la fe de que llevábamos todo lo necesario para hoy.

— Debiste programar más temprano el despertador — me dice entre soplidos por lo cansado que estaba de tanto correr, pero al menos ya habíamos llegado a los pasillos antes de que sonara el timbre definitivo.

— Lo programe, idiota, fuiste tu el que pedía un rato más — me quejo viendo el salón donde me tocaba clases cerca —. Tu también eres culpable, Omar.

Le choco el hombro molesta y él suelta una risita antes de que me vaya al salón, pero en eso, me hace dar la vuelta para que lo mire. El condenado cargaba una sonrisa en el rostro.

— Isa, solo era broma, llegamos a tiempo ¿o no? — me pone una mano en el hombro para luego despeinarme —. Ve a clases, enojona.

Iba a darle un golpe, pero en ese instante vi que la maestra Isadora estaba por cerrar la puerta por lo que corrí hacia ella, le ofrecí una sonrisa que fue seguida por su pesado discurso de la importancia de la puntualidad un poquito larga. Lo único bueno es que me dejo pasar.

Me quede en el único asiento libre que quedaba cerca de la ventana, saqué mi libreta y comencé a garabatear mientras la profesora se encargaba de hablar sobre la colonización y no sé que más. No le prestaba mucha atención que digamos ya que habíamos repetido tantas veces el tema en los años anteriores por lo que me daba igual, solo estaba tomando el tiempo hasta la siguiente hora que vendría a ser de literatura avanzada. 

Esa era mi clase favorita por varias razones: Era buena en la materia, la profesora daba buenos contenidos que si me llamaban la atención, podía dar mi opinión con libertad, me caía bien la señorita y bueno... estaba él.

Ya sé, ya sé que suena acosador a este punto o no lo sé porque para mi no lo es.

No he hecho nada más que verlo unos segundos en clases, puede que lo dibujara por aburrimiento, también que lo escuchara con atención cada vez que hablaba y bueno, escribir un par de poemas para él sin que lo supiera, cosa de gente normal, no es nada acosador puesto que hasta ahora no lo he seguido a casa simplemente lo miro ya que cada que está roba mi atención, pero lo disimulo como puedo.

A este punto, después de un par de semanas desde nuestro primer encuentro puedo llegar a imaginarlo de memoria con solo cerrar los ojos y sonreír como una estúpida. Por eso amo tener memoria fotográfica ya que no se me borra su imagen en ningún momento.

Al escuchar el timbre tome mis cosas y corrí a la sala de literatura a mi puesto de siempre, el último de la fila junto a Dalton. Él aun no había llegado. La verdad es que el salón seguía un tanto vacío, pero no podía hacer nada, estaba un poco ansiosa porque enserio amaba que el sistema educativo me diera una hora de literatura todos los días dándome la oportunidad de convivir en su mismo espacio aunque no lo note.

Una sonrisa adorno mi rostro en cuanto su cabello azabache con esa figura imponente acaparó todo mi campo visual y no porque estuviera frente a mi, se robaba toda mi atención siempre que entraba por la puerta.

Cualquiera diría que con la pinta que carga ni siquiera entraría a una clase avanzada, pero él estaba en dos de ellas hasta donde yo sabía, aunque por desgracia solo lo acompaño en una por ser tan mala en matemáticas, pero al menos tenía a mi querida amiga Kyle en esa clase haciéndome de informante.

Lo Que Significas En Mi Poema Where stories live. Discover now