•Parte IV•

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Como ya vimos en el capitulo III, Ansiedad salió de la habitación avergonzada, y con pensamientos malos, pero... ¿Qué paso con Ansiedad?

Temor se quedó parado en el mismo lugar, mirando hacia donde Ansiedad había salido corriendo. Sentía una mezcla de emociones, amor, preocupación y una leve punzada de miedo.

Temor: Tengo que encontrarla, no quiero que se sienta mal por esto...!

Ennui levantó la mirada de su teléfono y lo observó con su típica expresión.

Ennui: Si quieres, puedo ayudarte a buscarla, Temor -decía un poco preocupada por Ansiedad-

Temor: Gracias, Ennui -decía alzando la cabeza-

Ennui: Sisi, esta bien.

Juntos, Temor y Ennui comenzaron a buscar a Ansiedad por las diferentes áreas de la mente de Riley. Temor sentía la urgencia de encontrar a Ansiedad lo más pronto posible, mientras que Ennui caminaba a su lado con pasos tranquilos y observadores.

Temor: Creo que deberíamos revisar la habitación de los recuerdos primero, es probable que Ansiedad se haya ido ahí...

Ennui: Suena lógico, vamos entonces...

Caminaron en silencio por los pasillos mentales, cada uno perdido en sus pensamientos. Temor se preocupaba por cómo se sentiría Ansiedad después de haberle confesado sus sentimientos de esa manera tan inesperada. Mientras tanto, Ennui veía celular, un poco preocupada por Ansiedad, pero le daba igual.

Después de un rato, llegaron a la habitación de los recuerdos. Temor se detuvo frente a la puerta, nervioso por lo que encontraría dentro.

Temor: Espero que esté bien...

Ennui: No te preocupes tanto Temor, Ansiedad es fuerte, encontrará la manera de manejar esto.

Temor asintió, agradecido por las palabras reconfortantes de Ennui. Juntos entraron en la habitación, buscando a Ansiedad entre los rincones donde podrían encontrarla.

Ennui: Ansiedad, ¿estás aquí? -llamó Ennui en su tono calmado-

Temor se mantenía en silencio, escuchando atentamente cualquier indicio de respuesta. El ambiente en la habitación era tranquilo, solo interrumpido por el ligero zumbido de los recuerdos que flotaban a su alrededor.

Mientras tanto, Ansiedad había encontrado refugio en un rincón tranquilo de la habitación de los recuerdos. Estaba sentada en el suelo, abrazando sus rodillas y con la mirada perdida en la distancia. Las dudas y el miedo la invadían, preguntándose si había sido un error confesar sus sentimientos.

Ansiedad: ¿Qué he hecho? ¿Y si esto arruina nuestra amistad? -se preguntaba en voz alta, tratando de calmar su mente acelerada-

De repente, escuchó pasos acercándose y levantó la vista para ver a Envidia entrando en la habitación.

Envidia: Ah, aquí estás, Ansiedad. Estaba buscándote... -dijo con una sonrisa traviesa-

Ansiedad: Envidia... no quiero hablar ahora. -respondió con un suspiro-

Envidia: Vamos, Ansi, esto te animará. -dijo, sacando un vestido en la cual le pertenecia a Desagrado (no me funen)- Pruébatelo, por favor...

Ansiedad: WT- Un momento...

Ansiedad: ¿Un VESTIDO? -preguntó sorprendida, mirando el atuendo con una mezcla de curiosidad- No sé, Envidia. No estoy de humor para esto!

•Anxifear•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora