003

24 4 2
                                    

—¡Pansy! ¡Tuve una conversación con el! —Gritó emocionado, sus mejillas estaban rojas y calientes, el corazón le latía demasiado fuerte y se encontraba sudando.

Pansy miraba a su mejor amigo, este se encontraba increíblemente feliz.

—¿De que hablaron? —Pregunto Pansy, pues se preguntaba de que habían hablado para que Draco hubiera regresado tan rápido.

El platinado le empezó a decir de la muy corta conversación que habían tenido.

—Entonces le dije "Por nada, solo curiosidad", me despedí de el y me fui de ahi, es todo —Finalizo, mientras le daba una sonrisa radiante a Pansy.

La pelinegra se palmeo la cara mentalmente, ¿Solo de eso había hablado? Quería decirle algo a Draco, pero no podía simplemente arruinar su felicidad, así que se quedo callada.

—¡Felicidades Draco! Esa fue la primera vez que no se insultan —Forzo una sonrisa mientras abraza al de ojos grises, este le devolvió el abrazo muy alegre.

—Ahora, Pansy, ¿Cuál es el siguiente paso? —Estaba emocionado por saber cuál era el siguiente paso, ¿Besarlo? ¿Invitarlo a salir? ¿Regalarle algo? Pero no, era algo muchísimo más simple.

—Bien Draco, ahora debes ser su amigo —El contrario miro incrédulo a su mejor amiga, ¿Solo eso? ¿Era tan simple? Estaba apunto de refutar pero Pansy interrumpió.

—Draco, debes ser paciente —Pansy lo miro con una cara seria, Draco maldijo por lo bajo y asintió un poco desanimado, ¿Osea que iba a tardar mucho? No era la persona más paciente del mundo pero si Pansy le decía que fuera paciente, pues tendría que ser paciente.

—Bien —Draco se fue a su habitación, dejando a una Pansy sentada en la sala común.

El rubio platinado subió a su habitación para distraerse un poco, a lo mejor leía.

Abrió la perilla de la puerta, camino hacia su cama y se sentó en la orilla. Cerro sus ojos y se puso a pensar en Potter, en el increíble y atractivo Potter.

Amaba sus ojos verdosos, eran como ver un prado verde y plano, sin flores, solo césped. Si pelo azabache, desordenado como un nido de pájaros, o al menos antes. El Harry pequeño le daba mucha ternura, pero la pubertad lo había golpeado fuerte y lo hizo muy atractivo, demasiado a su parecer.

A veces imaginaba estar en una cita con el, anhelaba ser su pareja, a menudo tenía sueños con el, en su mente siempre estaba el, Draco siempre pensó en Potter.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 20 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Go for it MALFOY!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora