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—Tienes que casarte con él—Ordenó su madre

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—Tienes que casarte con él—Ordenó su madre.

—Debes estar jodiendome, sabes que no puedo casarme con él —renegó Jungkook.

—No me interesan los problemas que puedan tener entre ustedes así debe de ser, así la empresa Jeon no se irá a la quiebra o ¿crees que si eso pasa vamos a poder costear tus gustos?

Jungkook en verdad no tenía opción, estaba casi atado de manos sin la oportunidad de opinar o negarse, ahora sería parte de la familia Kim.

Ahora sería el Omega de Kim Taehyung, ese alfa pretencioso que se creía superior a los demás solo porque su familia era pudiente, quizas ser el hijo único de la familia Kim lo hacía sentirse aún más soberbio al saber que sería el único heredero de todo ese imperio.

Siempre está bien presentable mirando a todos con desdén como si no merecen pisar el mismo suelo que él, desde que lo conoció tuvo un mal presentimiento, sin embargo, jamás se espero que lo fuera a tratar mal solo por pedir indicaciones. Que después de eso le hiciera quedar en ridículo más de una vez.

Era un alfa con un porte envidiable, serio y recto pero también podía ser el ser más despreciable o al menos así lo veía Jeon.

Porque si él tomó de esa manera la noticia, Taehyung no lo tomaría mejor.

—¿Es en verdad necesaria está unión? —Preguntó Taehyung aterrado por la noticia

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—¿Es en verdad necesaria está unión? —Preguntó Taehyung aterrado por la noticia.

—Lo es, la empresa de los Jeon está pasando por un mal momento —explicó su padre.

—Y ¿Eso en qué nos afecta? No es nuestra empresa.

—Estas en lo cierto, sin embargo hay cosas, clientes y tratados de libre comercio que solo tienen las empresas Jeon con ciertos países a los que nos ha costado entrar; al unirte con su hijo nos darían acceso a esos lugares.

Taehyung comprendía mejor que nadie, no era de su agrado en lo absoluto si pudiera evitarlo lo haría pero ese era el peso de ser hijo único y futuro dueño de las franquicias Kim.

—Muy bien, entonces avisame cuando sea la cena entre familias para estar preparado —pidió Taehyung antes de salir del despacho de su padre.

Se sentía furioso, sin embargo tenía que mantener el margen de sus emociones o las cosas saldrían mal para él. ¿Por qué de tantas familias y personas tenía que ser la Jeon?

Para Taehyung, Jungkook no era más que un niño berrinchudo en busca de llamar la atención, nunca entendió que fue lo que pasó pero de un día para otro el Jeon más joven comenzó a ser insoportable y un dolor en el culo para Taehyung.

Al punto en el que se volvió una guerra silenciosa, aunque quizás no tanto porque cada vez que Jeon quería hacerle algo no dudo en dejarlo en evidencia por sus comportamientos estúpidos e inapropiados.

Taehyung tenía mucha más educación que Jungkook y eso solo se debía a que el Omega probablemente jamás iba a tener una responsabilidad como tal porque era el menor de dos omegas en su familia. Pero su hermana se unió el año pasado dejando a Jungkook libre como una carne lista para ser escogida.

Una carne bastante rancia desde el punto de vista de Taehyung.

«Desagradable» es lo único que Taehyung podía pensar de toda esta situación.

«Desagradable» es lo único que Taehyung podía pensar de toda esta situación

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Vínculos Inesperados Donde viven las historias. Descúbrelo ahora