No pasó desapercibida la manera en que su corazón latió más rápido cuando su mano se posicionó en su mentón y obligó a sus miradas a conectar, algo que Harue pretendió evadir por lo que la hizo sentir. En cambio, Kokushibo la acercó a él en un intento de comprender sus emociones.
Ella frenó su propia proximidad con sus manos sobre el kimono del demonio, sin embargo, era imposible ignorar la cercanía y el tenue roce entre sus cuerpos.
—¿Por qué hiciste eso? —Kokushibo interrogó con calma al pasar los segundos.
—¿A qué te refieres? —ella averiguó ante la ambigüedad de sus palabras. ¿Se refería al toque?
—Tú rostro —enunció sin apartar su agarre y sus ojos de ella—. Te tensaste y apartaste —explicó.
Harue tragó saliva sin encontrar qué decir, pues ella misma no lo sabía, o lo hacía y lo encontraba imposible de admitir.
—No lo sé —se limitó a pronunciar desviando la mirada con dificultad.
—Mírame —exigió y ante la resistencia de la joven apretó su agarre en su rostro. Los ojos esmeralda se doblegaron—. ¿No lo sabes?
—No. —Su respuesta salió entre la dificultad y sofoco de su propia garganta y respiración acelerada sometida al poder que su cercanía tenía sobre ella.
Su respuesta lo irritó. Controló su respiración y la soltó. Habría otras noches. Ella inmediatamente rehuyó de sus seis ojos y le dio la espalda, frotándose las muñecas para sosegarse.
—Cada día te comprendo menos.
—No hay nada que comprender —reafirmó despejando su mente de cualquier pensamiento. Parecía que aquella frase también se la decía ella misma—. He visto que llevas una katana —comunicó cambiando el tema de conversación.
—Gran observación —dijo con sarcasmo—. Es una espada nichirin.
—¿Cuál es la motivación para traerla contigo? —Harue finalmente se giró a él, calmada.
—Soy un hábil espadachín y no pretendo dejar de serlo.
—No lo dudaría si llevas años o... ¿siglos? portándola —ella comentó apuntando sus iris con fijación en el arma—. Tienes el porte de un guerrero. Enséñame tus habilidades.
Kokushibo enmudeció sintiéndose atraído por su interés.
—Eres caprichosa —le hizo notar.
ESTÁS LEYENDO
INSANE | Kokushibo
Fanfiction"Si me quedo contigo, si elijo mal, no me importa." Una fascinación retorcida emerge entre un demonio y una mortal, que desafía las leyes y expectativas impuestas por su naturaleza opuesta. Ella deberá lidiar con las consecuencias de enamorarse de u...