Macao se despertó con un peso extra en su cuerpo. Abrió lentamente los ojos y sintió la suave respiración de Kim en su cuello, su aliento cálido y rítmico.
Una de sus piernas descansaba pesadamente sobre su cadera, impidiéndole moverse con facilidad.
Kim, amor- murmuró Macao, su voz aún adormilada mientras intentaba moverse- Mierda- se quejo al sentir un leve dolor en su trasero, recordando la noche anterior- Quiero ir al baño- Murmuró mientras veía a su primo removerse.
Kim se removió, estirando levemente su cuerpo mientras sus ojos parpadeaban para despejarse del sueño.
¿Qué hora es?- preguntó, su voz grave y somnolienta.
Las 9 de la mañana- respondió Macao, antes de sentir como Kim se ponía duro- amor, necesito ir al baño- dijo viendo al mayor
Con un suspiro, Kim retiró su pierna y se giró, dándole a Macao el espacio que necesitaba para moverse.
Macao se levantó con cuidado, sintiendo una punzada de dolor que le hizo fruncir el ceño, y caminó lentamente hacia el baño.
Mientras cruzaba la habitación, sus movimientos eran cuidadosos, cada paso recordándole la intensidad de la noche anterior.
Lo salvaje que habían sido por la adrenalina de haber matado a varios en una misión con sus hermanos mayores.
Desde la cama, Kim lo observaba, una sonrisa juguetona y orgullosa apareciendo en sus labios.
No te rías- dijo Macao mientras veía a Kim acomodarse en la cama.
No me estoy riendo amor, solo admiro tu hermoso trasero y mi magnífico trabajo que hice anoche- dijo viendo a Macao sonreír.
Sabes, fuiste muy salvaje ayer, pensé que me dejarías inválido- dijo Macao viendo al mayor
Esa era mi idea amor- comentó su tono lleno de una mezcla de orgullo y diversión.
Macao lo miró por encima del hombro, sus mejillas sonrojadas.
No te tardes que tengo los huevos todavía llenos, y los quiero vaciar en tu agujero- dijo con voz ronca mientras veía al menor
Tú... puedes ser demasiado a veces- murmuró antes de cerrar la puerta del baño tras de sí.
Kim sonrió divertido antes de arrojar la sabana que cubría su cuerpo para poder masturbarse con tranquilidad.
Cuando Macao salió del baño, sintiéndose un poco más aliviado, pero aún con la ligera incomodidad del dolor.
Al abrir la puerta, sus ojos se encontraron con una escena que lo dejó sin palabras.
Su primo se encontraba masturbando lentamente, su mirada fija en Macao.
¿En serio, Kim?- Macao cruzó los brazos, tratando de parecer firme, aunque la vista de su primo en ese estado era extremadamente tentadora-No vamos a tener sexo ahora- aclaro viendo al mayor.
Kim sonrió divertido, su mano nunca dejando su ritmo pausado.
¿Quién dijo que tenías opción?- pregunto con un tono juguetón- Ven aquí- ordenó viendo al menor
Macao frunció el ceño, pero no pudo evitar que una pequeña sonrisa se formara en sus labios.
Se acercó a la cama, sintiendo el calor que emanaba del cuerpo de Kim.
Eres imposible- murmuró mientras subía al regazo de Kim.
Y aún así me amas y eres adicto a mi verga- dijo Kim viendo a su primo sonreír.
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Toxic Love
RandomMacao no sabe con quién se acostó, pero lo quería repetir ya que habia sido el mejor sexo que tuvo, así que decide volver al mismo antro Kim se volvió adicto al cuerpo, aroma y sabor de su primo Macao después de haber tenido el mejor sexo de su vid...