𝐏𝐑Ó𝐋𝐎𝐆𝐎.

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Love's gonna get you killed
But pride's gonna be the death of you,
and you and me.

PRIDE - Kendrick Lamar.

 PRIDE - Kendrick Lamar

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120 D.C
Desembarco del Rey.

Para la gente común, los Targaryen estaban más cerca de los dioses que de los mismos hombres. Era algo recurrente oír susurros de los majestuosos que eran los dragones que poseían, como estos volaban por los cielos con su jinete, verlos descender hasta tierra era un espectáculo digno de admirar, para muchos algo insólito, para otros, algo aterrador.

La dinastía Targaryen llevaba más 100 años en el poder, llena de lujos y riquezas. Para mantener aquel estatus, solían comprometerse entre sus mismos miembros, para mantener la sangre de la antigua valyria pura.

Era algo que el Rey Viserys I sabia muy bien, para él, era muy importante que su sangre perdurará. Su hija Rhaenyra, su heredera, le había hecho una propuesta muy tentadora, le había ofrecido un matrimonio entre su hijo mayor Jacaerys Velaryon, que hace unos meses se había prestando como alfa, con su hija Helaena Targaryen que era una adorable omega. Esta propuesta ofendió a Alicent, la reina y madre de la omega, diciendo que jamás casaría a sus vástagos con uno de los "Poco agraciados" hijos de Rhaenyra.

La corte murmuraba cosas sobre los hijos de la princesa, dudaban de su legitimidad, algo que jamás fue comprobado o desmentido, los niños no se parecían en nada a su padre Leanor Velaryon aunque la relación que esté tenia con sus hijos era estupenda. La princesa Rhaenyra se sintió ofendida ante la repentina declinación de su oferta, pero se tomó el tiempo de reflexionar que sus pequeños hijos tenían mucho más tiempo para eso, ya que Jacaerys tenía 9 años, Lucerys 7 años, y Joffrey tenía unos meses de haber nacido.

"¿Existirá el día en que esa mujer deje de hacerle la vida imposible? "- Dijo Rhaenyra, tocando el cabello de su hijo Joffrey, era apenas un bebé, recordó el día en que nació y la Reina ordenó que le presentarían a su hijo inmediatamente, sin importarle que su madre estuviera recuperándose de su labor de parto.

"¿De que mujer hablas?" - Preguntó Leanor, su esposo, que estaba entrando a la habitación donde ella se encontraba, era el único lugar donde encontraba paz, a pesar de que la Fortaleza Roja siempre fue su "Hogar". Aunque su matrimonio fue por mero compromiso, ella había encontrado en él un compañero en el cual confiar.

"Alicent, me negó la propuesta que ofrecí en el consejo hoy, sobre casar a Helaena con nuestro Jacaerys." - Susurro Rhaenyra, como si estuviera reprimiendo sus ganas de maldecir a esa mujer de cabellos pelirrojos.

"Esa bruja" - Exclamo Laenor, mientras servía un poco de vino en una copa. "Pero podría ser lo mejor, no quisiera ver a Jacaerys casado con una Hightower, además, espero que todos mis hijos busquen sus matrimonios por amor, no por obligación".

"¿Y crees que no pensé en eso? Claro que quiero que Jace se comprometa con la persona correcta para él, pero he visto a Helaena, su corazón es tan amable, y sobre todo, dulce. Nada que ver con sus familiares, estoy segura de que ellos harían una buena unión, esto hubiese acabado con años de disputa". - Dijo Rhaenyra, triste, ya que para ella, Helaena era lo que toda madre quisiera en la pareja de su hijo.

𝕽EPRESSED - lucemondDonde viven las historias. Descúbrelo ahora