[ Recuerda Donde Buscarme ]

01ㅤ|ㅤUna Pésima Mentirosa.

Holis, mis estrellitas. Espero de corazón que les guste esta historia y puedan disfrutarla leyendo, tanto como yo escribiéndola. Simplemente pido su comprensión caso las actualizaciones sean publicadas muy vagamente, pero es que, estoy reescribiendo todo desde cero. Porque siento que no hice la trama entendible en ciertos detalles, que son necesarios para el desarrollo de los personajes. Entonces, sin nada más que agregar. Quédense con el capítulo de hoy.

Odiabas profundamente lo blanco que eran las paredes del consultorio, sientes como si estuvieras enferma solo de estar en un hospital, entonces aquello iba poniéndote nerviosa al punto de tener las piernas temblorosas de ansiedad.

¿Por qué se tarda tanto?

Era la duda que resonaba en tu mente mientras más tiempo esperabas al doctor. Supuestamente había ido a buscar los resultados de unos análisis que viniste a hacer — idea esta que fue de tu padre — porque necesitabas aclarar unas dudas.

Incógnitas esas que te carcomen del estrés, ya que en casa, tu familia no se cansa de preguntar sobre el tema. Entonces, querías resolverlo pronto para estar en paz mínimamente por unos días.

— Perdóneme la tardanza. — entró a la sala disculpándose el hombre con anteojos vestido de blanco.

— No se preocupe. — respondes con una sonrisa amablemente tímida, descansando tus manos sobre las rodillas para detener aquel temblor nervioso.

Ves como el médico se acomoda en la silla detrás de su escritorio silenciosamente, dejando sobre la mesa los papeles de tus exámenes hospitalarios que mandaron a hacerte.

— Aquí tienes. — extendió su mano para entregarme el documento.

Mirándolo con nervios, sostienes el sobre y lentamente decides abrirlo, suspirando cuando sacas el papel para leerlo.

Tomas el tiempo que sea necesario para entender lo que dice, pero al hacerlo, preferías nunca haberlo hecho en realidad, estabas arrepentida.

Esto no puede ser verdad...

Debe haberse equivocado. Tiene que estar mintiéndome.

— Oye, muchacha. ¿Te sientes bien? — el doctor volvió a dirigirme la palabra cuando percibe que mi reacción no era buena.

— Y-yo... — su voz fallaba torpemente.

Suspiré, rindiéndome a contestar. Volteando a mirarlo nuevamente, mantengo el silencio al morderse los labios bastante nerviosa.

— Descuida. Estoy aquí para explicártelo. — intentó calmarla usando un tono de voz suave para hablarme. — Te ves joven y supongo que es la primera vez que te haces un análisis así. — dijo entendiendo mi evidente confusión.