Baby Baby - Josuhan

Capítulo 9: The Hand

Nijimura Okuyasu era un hombre sencillo que disfrutaba de las cosas sencillas. Buena comida, su amante, sus amigos... Esas eran las cosas más importantes para él.

Era natural que la hija de su mejor amigo se añadiera a esa lista. Si alguien era importante para Josuke, era de esperar que también lo fuera para Okuyasu. Porque Josuke era una de las figuras más importantes en la vida de Okuyasu, y Okuyasu quería que fuera feliz y se sintiera totalmente apoyado.

Y la hija de Josuke era adorable, así que también estaba eso.

La cuestión era que Okuyasu no habría rechazado de ninguna manera a Josuke cuando le llamó para pedirle que cuidara de Reimi para poder tener una cita con Kishibe Rohan. ¿Si eso significaba que podría jugar con su sobrina (honoraria) favorita y ayudar a Josuke a ser feliz? Claro que sí.

Sin embargo, la tarea de niñera fue un poco más aburrida de lo que esperaba. Hasta ahora lo único que había hecho Reimi-chan era dormir. Bueno, había tenido un día ajetreado, conociendo a toda la familia de Josuke y esas cosas. Qué suerte, tener una gran familia que la apoye. A Okuyasu se le llenaron los ojos de lágrimas, estaba tan emocionado.

¡Y él era parte de la familia! El tío favorito de Reimi. Josuke lo había dicho. Era el hombre más afortunado del planeta.

A través del monitor del bebé, se oyó a Reimi gemir un poco, y Okuyasu se levantó de un salto. ¡Se estaba despertando! Su deber como tío favorito estaba a punto de comenzar.

Subió corriendo las escaleras para saludar a su niña favorita. Estaba tumbada en su cuna, agitando los brazos en el aire y quejándose.

Olía a caca de bebé.

"¡Eeeeew! Alguien necesita un pañal nuevo". Okuyasu levantó a Reimi y se dirigió al cambiador.

Quitarle el pañal sucio y usar The Hand para eliminar el asqueroso objeto fue bastante fácil. Sin embargo, ponerle uno nuevo a Reimi... Bueno, eso era más complicado de lo que parecía, y Reimi no ayudaba riendo y retorciéndose todo el tiempo que Okuyasu intentaba ponerle el pañal limpio.

Le costó varios intentos, pero al final consiguió ponerle uno limpio.

"Josuke hace que esto de criar niños parezca fácil, pero supongo que no lo es tanto, ¿eh?". Okuyasu metió a Reimi en sus brazos y se dirigió escaleras abajo con un pequeño zumbido. "¡Vamos, Reimi-chan! Vamos a darte de comer".

Eso, al menos, era algo que se le daba bien a Okuyasu. Consiguió sentar a Reimi en su trona con facilidad y empezó a meterle alegremente bocados de papilla en la boca. Tonio había hecho la papilla, así que no era de extrañar que Reimi se la comiera con tanta ansia.

"Es un cocinero buenísimo, ¿verdad, Reimi? Yo también estoy tomando clases para aprender a cocinar, pero no creo que llegue nunca al nivel de Tonio".

Reimi gorjeó a Okuyasu en respuesta, y a Okuyasu se le aguaron los ojos de nuevo.

"¡Eres tan dulce y comprensiva, Reimi-chan! No te preocupes. Trabajaré duro y luego te haré algo riquísimo. Como una tarta para tu cumpleaños. ¡Te encantará la tarta! Es dulce y sabrosa".

Reimi sonrió y agitó los brazos, así que Okuyasu decidió que definitivamente le entendía. Era una niña tan buena.

"Vamos, Reimi-chan. Vamos a ver la lista de actividades que nos ha dejado Rohan-sensei. Después de comer tanto seguro que te apetece mucho jugar, ¿verdad?".

Okuyasu tiró el cuenco vacío al fregadero y limpió a Reimi antes de volver su atención a la lista de "actividades" apropiadas para la edad de la hija de Rohan.