"Realeza"

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Capítulo 116

NARRADOR

Unas semanas después...

Aquella familia que le fue comentada a la mayor llegó hace unos días atrás, la prensa estaba más que atentos en cada paso que hacían

Se quedaron en un hotel donde su seguridad era de confianza, trataron el negoció que tuvieron entre manos para estar apunto de cerrarlo, Tn no participó en ese area

La pelinegra se encontraba en su oficina, algo habitual, pero fue interrumpida por la puerta

Tn: Dígame

Enfermera: Unas personas la quieren ver doctora

Se levantó para salir junto la enfermera, fue al elevador para bajar a recepción y encontrarse con una sorpresa algo inexpresiva

Tn: Qué se les ofrece?

X: Encantado, soy Conrad Lindström y ellas son mi esposa Leah y Astrid

Al escuchar aquel nombre, levantó la mirada para observarlos, reconociendo a sus clientes

Tn: Bienvenidos a nuestro hospital señores Lindström

Leah: Un gusto conocer a la doctora más reconocida del mundo
-Sonrió-

Conrad: Vinimos aquí para realizar una donación, su enfermera ya está al tanto de todo, no tiene porqué preocuparse
-Estrecharon las manos-

El hombre bajo la mirada, mientras acordaban su trato, observó el tatuaje de la contraria y rápido subió la mirada para observarla

Astrid: Ocurre algo papá?

Conrad: No hija

(...)

Pasaron unas horas en la oficina de la superior conversando para luego retirarse ya que tenían veladas a las que asistir

Conrad: Vayan adelantándose

Leah: Sí, querido
-salieron-

Conrad: Usted hace negocios con la señorita Andrea García?

Tn: Soy su socio

Conrad: Lo supuse, ya que son las unicas con ese emblema, como esque no supe antes de usted sobre esto?

Tn: No deseo que mi información se divulgue por el negoció, prefiero ocuparme de mis asuntos

Conrad: Lo hace para no ser descubierta no es así?

Tn: Exacto

Conrad: Entonces usted ya supó de nosotros antes de que vinieramos

Tn: Está en lo correcto

Conrad: Esperó y sea confidencial

Tn: No se preocupe por eso

Conrad: Nos vemos doctora Laurent

Tn: Lo acompañó

Los tres fueron saliendo del edifició, junto a Tn que los acompañó para agradecerles su visita y por la donación

Tn: No hacía falta que donaran nada, pero gracias

Astrid: Sabemos que eres de una familia rica, por eso se te facilita todo

Leah: Astrid, comportate

Astrid: Lo lamento mamá, pero es verdad, es incluso igual de adinerada que nosotros

Conrad: Esa no es forma de hablar delante de una persona mayor que tú

Astrid: Cuantos tiene doctora?

Tn: Veinticinco
-la miró-

Astrid: Ya casi va por los treinta, que horror

Leah: Astrid, silencio

Tn: Déjela, aún es jóven como para entender a las personas

Astrid: No la ofendí, para serle sincera se conserva muy bien
-Sonrió-

Al parecer una visita más vino en busca de la mayor, eran los Sink, de nuevo, cuando la pelinegra se percató de eso volteó a mirar a la realeza

Tn: Sigamos la conversación otro día

Astrid: Me calló bien

Conrad: Tiene prisa doctora, y esas personas?

Leah: Si no es mucho preguntar, quienes son?

Tn: Son familia de mi esposa

Astrid: Escuche que tenía una relación con una actriz pero no supe que estuviera casada

Tn: Lo estoy, tendrá que investigar más a la próxima

Casey: Buenas tardes, siento la interrupción

Conrad: No se preocupe, sería un gusto conocer a la familia de mi negociante, soy Conrad y ellas Leah y Astrid

Leah: Encantados

Lori: Un gusto, soy Lori, el es mí esposo Casey y ellos son nuestros hijos

Casey: Spencer, Caleb, Mitchell, Sadie y la pequeña está con sus abuelos

Leah: Todos tienen un parentesco peculiar y extraño

Astrid: Lo dices porque son pelirrojos, ojos claros y pecas, cierto mamá?

Leah: Sí

Lori: Tuvieron suerte, interrumpiamos algo?

Conrad: No, de echo que les parece si vienen a cenar con nosotros está noche?

Casey: Tn, que dices?

Tn: Pueden asistir ustedes, yo estaré ocupada

Astrid: Vamos doctora, usted tiene que venir con nosotros, si no, no sería igual
-la agarró del brazo suplicando le-

Tn: Como esque agarró confianza tan rápido?

Leah: Ella es así, es muy curiosa
-rió-

Astrid: Vendrá?

Tn: Está bien

Conrad: Me alegra, nos vemos a las 22:00 pm en el restuarante francés que está por el centro

Lori: Está bien, gracias majestad

Conrad: No hace falta llamarme majestad, con mi nombre es suficiente

Casey: Muy bien, nos vemos

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