El cuervo y la paloma (Wenclair)

Pesadilla en coma

(Esto es lo que le está pasando a Wednesday en el coma, es decir, lo que está soñando actualmente.)

Corrí a través de un bosque interminable, no tenía fin, pero necesitaba encontrar mi camino de regreso a Enid. No importaba qué. Le dije que haría todo lo posible por quedarme, pero a veces mi esfuerzo no es suficiente. Mis piernas tropezaron con la raíz de un árbol que crecía en el suelo, mi cuerpo cayó al suelo mientras sentía dolor en todas partes. Vi rojo en las hojas debajo de mí. Me levanté aunque rápidamente sentí que mi cabeza estaba a punto de explotar. No puedo rendirme, no aquí, no ahora. Tengo que seguir corriendo.

Un rugido estalló detrás de mí y me di la vuelta, con todos mis sentidos alerta y alerta. Me sonaba familiar, pero ¿de dónde? Solo un tipo especial de idiota sería lo suficientemente inteligente como para seguir de dónde venía el sonido. Vi una sombra de lo que parecía un monstruo, tenía la espalda muy encorvada, cabello rizado y feo de color pelirrojo, piel gris y ojos con una mirada salvaje. La mirada de un asesino.

Ese era Tyler, también conocido como Hyde.

Lo siguiente que recuerdo es que estoy corriendo, huyendo de mi pasado otra vez. Se necesita un tipo especial de idiota para darle la espalda a un monstruo que puede correr más rápido que un humano. Mis pasos eran increíblemente ruidosos, sabía que él me estaba siguiendo. Sus horribles rugidos resonaban por todo el bosque y sus pasos pesados ​​​​rápidamente me alcanzaban.

No, no, necesito contra atacar. Veo la espada que usé para intentar matar a Crackstone en el suelo del bosque húmedo. La recogí rápidamente y miré a la horrible criatura directamente a los ojos. Pero en lugar de ver mi propio reflejo en sus ojos, vi los de mi madre. El pánico me inundó. Soy igual que ella. No importa cuánto lo intente, ese reflejo siempre está ahí. Soy un tonto al pensar que puedo detenerlo.

Veo al monstruo balancearse y esquivo su ataque, pero él arroja mi arma al suelo. Entonces siento que me llevan y me inmovilizan contra el costado de un árbol, pero Hyde no lo hizo. Rowan lo hizo. Tenía los ojos bien abiertos y puso esa misma cara de desesperación en la que se convencía a sí mismo de que matarme era lo mejor. Sentí que todo el aire de mis pulmones abandonaba mi cuerpo. Esto estaba sucediendo de la misma manera que la última vez, la única diferencia es que esta vez sí moriré.

Pero el monstruo me salvó de nuevo. Pude ver el cuerpo de Rowan siendo destrozado mientras gritaba de dolor. Esta vez corrí, corrí lejos.

Pero eso es lo que pasa con los bosques infinitos, que en realidad solo se repiten. Sabía que era solo cuestión de tiempo antes de que algo me sucediera aquí. Ya puedo sentir que el corte en mi cabeza por la caída comienza a disminuir mi energía. Lo supe desde que el carmesí corrió desde mi cabeza hasta mis brazos, dejándolos cubiertos de sangre.

No puedo dejar de correr o se acabó, pero nunca he sido el mejor corredor.

No sé si podré escapar de la muerte esta vez...