gamer ; satzu

dreizehn

Tzuyu bajó sus manos hasta llegar al broche del sostén, de forma impresionantemente rápida se deshizo de el y pudo tener la vista que comenzó a volverse su favorita.

No esperó mucho tiempo antes de acercar su boca a uno de los pechos, besándolo para después meterse el pezón a la boca. Jugó con su lengua de forma pausada, escuchando las palabras de Sana sobre qué estaba funcionando y qué no. Esto no se trataba sólo de ella, Sana tenía que disfrutarlo como fuera.

Sentía los dedos de Sana enredarse en su cabello alborotado, algo que la hacía saber que estaba haciendo un buen trabajo. Luego pasó al otro pezón y siguió el mismo procedimiento.

Sana era sensible en esa zona de sus pechos, le encantaba que se la estuviera comiendo de esa forma. Con su lengua caliente y húmeda, justo como estaba ella ahí abajo.

── Quítate esta mierda. ── resopló sacándole la camiseta, estaba molestando mucho y Sana quería sentir toda su piel con la suya.

── Grosera. ── pero le hizo caso y le ayudó a quitarse la prenda.

Tzuyu no solía andar por ahí sin sostén, pero esta se veía como una excepción, pues su torso estaba totalmente desnudo tocando el de Sana.

Los besos volvieron, sintiendo cada una una ola de placer cuando Tzuyu se colocó bien entre las piernas de Sana y sus centros se rozaron. Fue un primer contacto bastante bueno, por lo que Sana volvió a hacer que se repitiera y escuchó el primer gemido de Tzuyu.

── Dios, no dejes de gemir. ── pidió Sana, le había encantado ese sonido.

── Déjame sentirte más.

Se levantó un momento para quitarse los pantalones y quedar en su ropa interior, algo que llamó la atención de Sana fue que incluso con la tela esa se veía que su novia era grande.

Una buena polla es lo que necesitaba. No. La buena polla de su novia, esa era la única.

Las pocas prendas que quedaban ya resultaban innecesarias, así que terminaron por quedar desnudas y besándose con pasión y lujuria.

── Quiero saltar sobre tí.

La quitó de encima y se sentó sobre sus piernas, sintiendo como ese pene tan grande chocaba contra ella y no podía pensar en otra cosa que no sea eso dento suyo. Así que con Tzuyu sentada ella se levantó lo suficiente para alinear su vagina con la polla de la menor, metiéndose de a poco.

── Ah~ ── gimió cuando estaba completa, Tzuyu cerró los ojos y soltó un suspiro. ── Tan caliente.

Ninguna quiso alargar el momento, así que Tzuyu comenzó a mover sus caderas mientras que Sana empezó con los saltos. Escuchando las pieles chocar y con sus gemidos de fondo, las dos se metieron por completo en la situación, disfrutando de ella.

Sana ya se sentía bastante cerca desde que Tzuyu le comió las tetas. Después de tanto tiempo sin hacerlo había perdido un poco la resistencia, mas se concentró en qué Tzuyu también estuviera disfrutando. Estaba siendo su primera vez, no lo olvidaba.

Para Tzuyu, tener a los pechos de Sana rebotar en sus ojos era más que magnífico. El maldito cielo ante ella.

Los movimientos no paraban, cada vez más rápidos y duros. Sana apretó los hombros de Tzuyu con fuerza, estaba por llegar, ya casi.

Unos saltos más y había logrado alcanzar el climax con Tzuyu aún dentro suyo. Y cuando la miró con los labios rotos de tanto morderlos, se dio cuenta de que ella aún no había llegado.

── Está bien. ── dijo buscando su calma.

── No, vas a llegar también. ── bajó de la polla aún dura y sin pensarlo mucho llevó su boca a esta.

El sabor salado de Tzuyu le gustó a Sana. Empezó a lamer la punta una y otra vez, después tragando todo lo que su boca podía aguantar.

Jugó con la lengua de la misma forma que Tzuyu con sus pechos, de vez en cuando rozando sus dientes también. Supo que lo estaba haciendo bien porque Tzuyu no se callaba, gimiendo fuerte por ella.

Su cabeza iba de abajo a arriba, dejando ver a Tzuyu como se la tragaba toda. Demasiado caliente. Demasiado íntimo.

── Ya- Ya casi, amor. ── avisó con un suspiro.

── Quiero tu semen en mis tetas, vamos.

Tzuyu se sorprendió de ello, pero no dijo nada. Dejó que Sana la mastubara con la mano y acomodándose de forma que cuando llegó finalmente estuviera todo sobre su pecho, manchando esa bonita piel blanca.

── Amor, eso fue... fue increíble. ── habló Tzuyu levantando a Sana para darle un beso más.

── Puede repetirse mucho.

── Que le jodan aún más a los streams entonces.

Sana se rió y le pidió que la acompañara al baño para limpiarse ambas.

Sí, había cumplido su capricho. Pero ahora tenía algo mejor, una novia que la quería. Tenía a Tzuyu, una chica gamer.