Unsettling Level of Chemistry (#Lukola)

Capitulo 27: Pasión

Me quedé sentada en mi sofá, sosteniendo la carta que había encontrado en mi buzón la noche anterior. Luke había dejado sus palabras cuidadosamente escritas, intentando explicar todo lo que había pasado en Toronto. Mis manos temblaban mientras la leía, una mezcla de emociones inundando mi corazón. Su disculpa era sincera, podía sentirlo en cada línea, pero el dolor aún era reciente y profundo.

Sus palabras resonaban en mi mente: "Nunca quise hacerte sentir así. Lo que pasó fue un error, y lo lamento profundamente." Mis ojos se llenaron de lágrimas. Había deseado escuchar esas palabras en persona aunque sabía que no las había permitido, pero entendía que esta era su forma de asegurarse de que yo realmente comprendiera lo que sentía y verdaderamente lo agradezco.

Al terminar de leer, supe que no podía dejar esto así. Necesitaba hablar con él, cara a cara. Necesitaba decirle lo que realmente sentía, necesitaba a mi hombre.

Me levanté con determinación y me dirigí a su apartamento. Toqué el timbre, mi corazón latiendo con fuerza. Luke abrió la puerta, y pude ver el alivio y la preocupación en su rostro.

"¿Puedo pasar?" pregunté, mi voz apenas un susurro.

"Claro, pasa," respondió, abriendo la puerta por completo.

Nos dirigimos a la sala de estar y nos sentamos, el silencio llenando el espacio entre nosotros. Finalmente, tomé aire y comencé a hablar.

"Luke, leí tu carta," dije, mi voz temblando. "Y quiero que sepas que te amo y te extraño muchísimo. Pero lo que pasó en Toronto me destrozó. Sentí que una parte de mí se rompía al verte con Antonia y tus amigos de esa manera. Acababa de enterarme de mi embarazo, quería compartirlo contigo y todo lo que pasó después claramente ya lo sabes."

Él asintió, su expresión llena de dolor. "Nic, nunca quise hacerte sentir así. Fue un error, y me arrepiento profundamente, debí poner límites, sé cómo son mis amigos, sé cómo es Antonia, reconozco que fue algo que se pudo evitar. De verdad quiero pedirte disculpa si te hice sentir poco importa en esos momentos."

"Lo sé," continué, tratando de mantener la compostura. "Pero en ese momento, me sentí tan desplazada, como si no importara lo que sentía o  lo que sucedida en ese momento. Estaba emocionada por nuestro bebé, y todo lo que quería era compartir esa felicidad contigo."

Luke me miró con una mezcla de tristeza y amor. "Te entiendo. Tú siempre importas, Nic. Tú y nuestro bebé son lo más importante para mí. Pero no supe manejar bien la situación con mis amigos, ni con Antonia."

Las lágrimas comenzaron a rodar por mis mejillas. "Siento haber sido tan hiriente contigo. Mis hormonas están por todas partes, y a veces no sé cómo manejarlo, no merecías todo eso lo admito."

Tomó mi mano con suavidad, sus ojos llenos de arrepentimiento. "No tienes que disculparte. Estamos en esto juntos, y quiero que lo resolvamos juntos."

Nos quedamos en silencio por un momento, sintiendo el peso de nuestras emociones. Finalmente, me incliné hacia él, buscando consuelo en su abrazo.

"Gracias por entender," susurré, sintiendo el calor de su cuerpo contra el mío.

"Siempre, amor. Siempre estaré aquí para ti, para nuestro pequeño gran amor," respondió, acariciando mi espalda.

Poco a poco, la tensión comenzó a desvanecerse. Luke me besó suavemente en la frente, y levanté la mirada, mis ojos llenos de amor y esperanza. Nos besamos, un beso lleno de pasión y promesas no dichas. Lo besé en los labios, lentamente, disfrutando de cada segundo.

Sus manos comenzaron a recorrer mi cuerpo, recordando cada curva, cada rincón que había extrañado tanto.
Respondí con igual fervor, mis manos aferrándose a su camisa, tirando de ella con urgencia.