Unsettling Level of Chemistry (#Lukola)

Capitulo 25: No es el momento- Canadá parte III

Me desperté en la habitación del hospital, sintiendo una mezcla de agotamiento y rabia. El suave pitido de las máquinas me recordaba que estaba bajo observación, y aunque la noticia del embarazo me llenaba de una extraña felicidad, la presencia de Luke me revolvía el estómago, había pasado tanto en mi vida durante las últimas veinticuatro horas que a este punto lo menos que quería era tenerlo aquí todo el tiempo.

Al abrir los ojos, lo vi sentado al borde de la cama, sus ojos rojos e hinchados de tanto llorar. En cuanto me vio despierta, se inclinó hacia mí, su expresión era de genuina preocupación y amor. Pero yo no quería eso en ese momento.

"Nic, gracias a Dios estás bien", dijo Luke, su voz temblando. "Estaba tan asustado."

"¿Asustado? ¿De qué, Luke? ¿De que no estuviera para soportar más de tus estupideces?", respondí, mi voz cargada de veneno.

"Nic, por favor, entiéndeme. No sabía que Antonia estaba allí. Mis amigos no sabían...", comenzó a explicar.

"No, Luke. No quiero escuchar tus excusas. Tú decidiste irte con tus amigos desde un principio y dejarme de lado. Yo estaba tan feliz, la gira y toda nuestra relación estaba siendo tan increíble, quería compartir algo increíble contigo, pero no. Tú elegiste estar con ellos y mira lo que pasó", lo interrumpí, sintiendo las lágrimas empezar a brotar de mis ojos.

Luke se quedó en silencio, sus ojos llenos de dolor. "Lo siento tanto, Nic. No sabía que estabas embarazada. Si lo hubiera sabido..."

"¡No se trata solo del bebé, Luke! Se trata de cómo me dejaste de lado cuando más te necesitaba. Yo estaba emocionada, quería compartir contigo algo tan importante y especial. Y tú estabas... tú estabas con ella, con Antonia casi desnuda en tu habitación", grité, mi voz quebrándose.

"Nic, te juro que no es lo que crees. No la invité yo, fue Rory. Si lo hubiera sabido, habría hecho todo de otra manera, nada hubiera llegado hasta este resultado, sabes que detesto a Antonia", insistió Luke, acercándose un poco más.

"Pero no lo sabías, ¿verdad? Porque estabas tan ocupado reviviendo tus días de soltero, bebiendo y perdiéndote en ser alguien que no eres, que ni siquiera te diste cuenta de lo que pasaba a tu alrededor", lo reproché, las lágrimas cayendo libremente por mis mejillas.

Luke se llevó las manos a la cara, sollozando. "Por favor, Nic. Dame una oportunidad para arreglar esto. Quiero estar aquí para ti y para nuestro bebé. Haré lo que sea necesario."

"¿Arreglar esto? ¿Cómo vas a arreglarlo, Luke? No puedes simplemente borrar lo que pasó. No puedes deshacer el dolor que me causaste. Estabas ahí, con tus amigos, ignorándome, y dejaste que todo esto sucediera", le respondí, mi voz llena de amargura.

Luke cayó de rodillas junto a la cama, tomando mi mano. "Nic, por favor. No me alejes. Necesito estar aquí para ti, para nuestro bebé. No puedo soportar la idea de perder un segundo más de todo este proceso, de perderlos a ustedes."

Lo miré, sintiendo una mezcla de compasión y rabia. "¿Perdernos? ¿Te das cuenta de lo que dices? Tú ya nos perdiste, Luke. No estuviste cuando más te necesitaba. Y ahora, tienes que vivir con eso."

La puerta se abrió y el doctor entró, interrumpiendo nuestra conversación. "Señora Coughlan, ¿cómo se siente?", preguntó, mirando entre Luke y yo.

"Estoy... estoy bien, doctor", respondí, tratando de recomponerme. "Pero necesito tiempo y descanso. No puedo lidiar con esto ahora." dije mirando a Luke.

El doctor asintió, entendiendo la situación. "Lo entiendo. Lo mejor para usted y su bebé es mantener la calma y evitar el estrés. Haremos más pruebas para asegurarnos de que todo está bien."