Venganza

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Luego de un rato Daishinkan y el bebé se durmieron, Moro quería hacerle el pastel de chocolate que tanto le gusta a su angel pero tenía que ir a buscar los ingredientes así que despertó a daishinkan para avisarle que saldría, una vez que se fue daishinkan estaba a punto de volver a dormir cuando alguien tocó la puerta y cuando fue a ver quien era se llevó una gran sorpresa.

Shugo: Buenos días daishinkan

Daishinkan: Señor Shugo que gusto verlo, que se le ofrece?

Shugo: Bueno, me enteré que.... mi nieto nació y quería venir a conocerlo

Daishinkan: Ahh si, bueno moro acaba de salir pero pase podemos esperarlo mientras puede ver al bebé- entran a la casa y van a la habitación

Shugo: Wow es un bebé muy bello

Daishinkan: Si, me alegro tanto de que este aquí alfin

Shugo: Por cierto... es verdad que tu padre intentó matarlo?

Daishinkan:....... Mi padre nunca me comprendió, aún así pude perdonarle todo pero esto....... nunca se lo perdonaré

Shugo: Te entiendo, no puedo creer que haya querido lastimarte y tu hijo, es algo imperdonable

Daishinkan: Pero aún así me gustaría que lo viera, talvez su idea cambie

Shugo: Puede ser pero por el momento deja que se calme un poco. No deberías preocuparte tanto, tienes una linda familia, me habría gustado tener algo así cuando pude pero..... bueno, Moro aún no me perdona nada

Daishinkan: Que fue exactamente lo que paso?

Shugo: Sinceramente creo que ya no importa, solo me gustaría que moro me diera una oportunidad más

Daishinkan: Estoy seguro de que en algún momento él verá su arrepentimiento y lo perdonará, solo dele tiempo

Shugo: Si tienes razón, por otro lado hay algo que quisiera hablar contigo

Daishinkan: Claro que pasa?

Shugo: Pues para serte sincero al principio quería usarte como un simple rehén y la primera vez que te visite quería llevar a cabo mi plan pero..... ahora entiendo porque Moro cambio, tu haces cambiar a la gente

Daishinkan: De que hablas? A que te refieres?

Shugo: Que te necesito para llevar a cabo mi venganza pero ahora serás algo más que un simple rehén

Daishinkan retrocedió un poco chocando con la cama y Shugo aprovechó para agarrarlo de los brazos y tirandolo a la cama para ponerse sobre él

Daishinkan: NO PORFAVOR!!!!! SUELTAME!! NO ME HAGAS DAÑO!!!

Shugo: No intentes detenerme, has dado a luz, estás débil, no puedes hacer nada

Justo cuando Shugo le iba a quitar la bata llegó Moro

Moro: Daishinkan, mi amor estas despierto?- cerrando la puerta

Daishinkan: MORO AYÚDAME PORFAVOR!!!

Moro: DAISHINKAN!!- corre hacia la habitación y ve a su padre parado frente a él con daishinkan entre sus brazos- SUELTALO EN ESTE MOMENTO!!

Shugo: Ja enserio crees que lo haré? No me hagas reír- sonrio maliciosamente y desaparecer con daishinkan

Moro: DAISHINKAN!!!!..... Maldición, maldito INFELIZ!!!! Te juro que esto no se quedara así- el bebé empieza a llorar y lo carga para calmarlo- Tranquilo mi vida, mami estará bien, papi se encargará

Moro sale con su bebé en busca de merus y sus amigos para salvar a daishinkan, tenía un mal presentimiento pero aún así trataba de ser positivo, al llegar al castillo de bills y contarle lo sucedido.

Con mi secuestrador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora