♥︎♥︎♥︎ Historia de amor entre Capitán Man y Scarlet Midnight (interpretada por mi queridisima y talentosa Britney Spears) ♥︎♥︎♥︎
•~~ Scarlet es una profesora de baile que se muda al local de enfrente pero que guarda un secreto y corre peligro. Ray...
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☆POV Scarlet en la tienda☆
El susto de mi accidente pasó, y volvi a ocuparme de mis asuntos, como lo que había comprado. Como todavía no tengo teléfono porque no me alcanza, le pedí a Charlotte el favor de usar su numero para que me avisaran si iban a traer mi colchón para yo estar en mi casa y recibirlos. Ella aceptó con gusto y prometió avisarme si le decían algo. Y por fin llego el día.
-Scarlet, venía a avisarte que los de la casa de muebleria ya vienen a traer lo que compraste-me avisa mi amiga viniendo de detrás de la tienda.
-Okay gracias por avisarme, Charlotte - le agradezco con una sonrisa. ¿Te importaría cubrirme en el mostrador? Hasta que vuelva voy a cruzar enfrente a esperar y abrirles.
Ella me sonríe y asiente. -Claro, Scarlet, tu tranquila.
Entonces me salgo de la tienda y me cruzo a esperar al camión de entregas, no veo la necesidad de decirle a mi jefe porque serán unos minutos nada más y no quiero molestar por una tontería. Llevo nada mas esperando cinco minutos cuando veo salir a Ray de la tienda. Él me ve al otro lado y yo me preocupo de que se haya molestado , pero me da una sonrisa que me tranquiliza antes de avanzar hacia mi.
-Me dijo Charlotte que estabas aquí-me dice al llegar a mi lado
-Si, perdón por no avisar -me disculpo-. Pero llevo rato esperando que me traigan el colchón.
Así voy a poder dormir y despertar sin dolor de espalda.
Ray sacude una mano. -Esta bien, pero me lastima que no hayas recordado lo que te pedí que hicieras. -señala mirándome con una expresión de decepción pero no parece genuina. Parece que esta bromeando.
Me preocupo igual, de que me olvide? ¿que me pidió? Algo del trabajo? No... me quedo pensando unos segundos más hasta que recuerdo esa conversación de semanas atrás.
-Ah!! Tu dices de que te avisara para ayudarme a entrar el colchón -respondo entendiendo.
-Si, de verdad quiero ayudarte en lo que pueda -me recuerda, tomando mis manos y mirándome a los ojos de forma intensa.
Siento mi estómago lleno de mariposas y sus manos se sienten cálidas y fuertes. Creo que de repente tengo mucho calor y sudor. No puedo despegar mis ojos de los suyos y debo de parecer un tomate de lo sonrojada que me siento. Es que es imposible no sentirse así en su presencia.
Trago saliva y por fin puedo hablar de nuevo. -Gracias, eres muy dulce... amable! Quise decir amable!
Me corrijo rápido, no quiero dejar mala impresión. Estúpida vergüenza me hace decir cosas tontas. Pero Ray me sonríe de esa manera astuta que me hace saber que sabe que yo de verdad quería decir eso.
Entonces por fin llega el camión. Ray me suelta las manos de forma suave para girarse a ver al camión. Yo me abrazo y trato de controlar mis reacciones pero es inútil porque estoy toda sonrojada y me recorren escalofríos. Siempre me pasa cerca de él, y a Ray le gusta mucho mi espacio.
