capitulo 10

13 3 0
                                    

A veces, los héroes más inesperados aparecen cuando menos los esperamos."

Emma

No entendía nada de lo que estaba pasando. Todo había sucedido tan rápido que apenas podía procesarlo. Un momento estábamos Zack y yo en el arcade de nuestra infancia, divirtiéndonos como en los viejos tiempos. Al siguiente, casi nos besamos. Y de repente, aparece "Wendy"

Zack y ella parecían conocerse muy bien. No podía negarlo, la pelirroja teñida era realmente bonita. Tenía una figura curvilínea y unos ojos castaños que brillaban con picardía. Era más alta que yo, pero no tanto como Zack.

—¿Cuándo llegaste? —Zack la saludó con una sonrisa radiante, como si no la hubiera visto en años-. ¿Cómo está Bianca?

— Llegué hace unos días —respondió ella con una sonrisa encantadora— el viaje fue largo y agotador, pero valió la pena por el cambio de aire. Mamá está muy bien.

Estoy empezando a creer que le hace propaganda a las compañías de crema dental

Pude notar que mi mejor amigo la miraba algo fascinado, hasta que se acordó de mi existencia. O eso creo porque me miro y me regaló una pequeña sonrisa.

—Wen, ella es Emma mi amiga — nos presentó, con una sonrisa.

—mucho gusto en conocerte Emma, soy Wendy Ferreti — ella me dió una linda sonrisa —y tambien soy amiga de Zaki

¿Zaki?, ¿en serio?

—un gusto, ¿Y...desde cuándo se conocen?—inquirí intentando sonar casual, aunque la verdad estaba muy incómoda

— En realidad, ella y yo nos conocemos desde que tenemos memoria —respondió Zack, notando mi incomodidad— Wen, fue un gusto volver a verte y espero que podamos reunirnos pronto para seguir hablando. Pero ahora tengo que llevar a Emma a casa.

—¿Tan temprano deben irse? —preguntó ella con un tono de voz que me pareció coqueto.

—No está bien, no te preocupes, yo puedo tomar un Uber —dije rápidamente para evitar que la situación se volviera más incómoda— nos vemos el lunes.

—dije que te llevaba a casa —defendió Zack con firmeza.

— Y yo dije que podía irme sola a casa —repliqué con firmeza, sintiendo una extraña mezcla de emociones: ira, frustración.

—Emma... —el no parecía muy convencido de dejarme ir sola debido a que ya se estaba haciendo tarde, Zack iba a decir algo hasta que una voz lo interrumpió.

— ¡Hocconer! Creía que se te había contratado para que encargaras del para operar las máquinas no para que jugaras con ellas.

¿Que dijo? ¿Zack trabaja aquí?

El sujeto que lo había dicho se estaba acercando isterico a nosotros — ¿Acaso no escuchaste?

—Si, te escuché perfectamente ya voy en camino —respondió el con la mandíbula tensa, me miró y me regaló una sonrisa — sorpresa tengo trabajo— mi amigo saco su billetera, contó el dinero y me lo ofreció —toma y... Avísame si llegaste bien a tú casa ¿Bien? —su mirada era de una preocupación genuina.

No sabía si aceptar el dinero que me ofrecía ví como Wendy nos miraba y note en ella una expresión que no supe identificar muy bien, mordí mi labio inferior y con toda la pena del mundo lo acepte.

—gracias, te lo devuelvo el lunes —eso me salió tan bajo que apenas era entendible.

—Sabes que no tienes que devolverlo— respondió guardando su billetera y acomodando su mochila en sus hombros.

Cometa [libro 1] [en Curso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora