𝓜𝓮 𝓰𝓾𝓼𝓽𝓪𝓼 𝓶á𝓼 𝓺𝓾𝓮 𝓾𝓷 𝓮𝓵𝓸𝓽𝓮

1.- 𝑀𝑒 𝑔𝑢𝑠𝑡𝑎 𝑐𝑜𝑛 𝑑𝑜𝑏𝑙𝑒 𝑠𝑎𝑙𝑠𝑎

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Fui con mi mamá, mi hermana y Dylan a la feria, solo que el plan no era quedarme con el sujeto que asalte momentos antes de estar aquí, acompañándolo para comprar un elote.

No me mira y yo no trato de verlo, sé que me reconoce y que él sabe que lo reconocí.

- ¿Y qué es lo que haces en este momento?. - me pregunta mirándome y cuando lo hace lo miro.

- ¿A qué te refieres? En este momento estamos caminando para ir al puesto de elotes.

El se ríe y es un indicio en que entendí mal.

- Quiero decir a que te dedicas.

- Oh eso, bueno, soy estudiante.

- ¿Ah,si? - me vuelve a mirar - ¿Qué estudias?

- Por el momento estoy estudiando la pura preparatoria. - miró a otro lado. - ¿Y a qué te dedicas? - le devuelvo la pregunta.

- De albañil, por el momento trabajo en la inmobiliaria que trabaja tu mamá.

Los dos llegamos al puesto y nos formamos habiendo tres delante de nosotros, mientras sentía como sigue la fila detrás de nosotros lo miro por un rato mientras él mira al frente, me da pena verlo después de lo que pasó y que me hable como si nada.

- ¿Y cuantos años tienes? - me pregunta.

- Tengo 17 años. - suelto con dificultad. - ¿y tú?

- Yo acabo de cumplir 27 años. Pero siento que tengo 17 de nuevo.

El se ríe y yo para acompañarlo me rio, pero vuelve el silencio incómodo mientras avanza la fila.

- Si quieres meterme preso hazlo, estás en tu derecho.

Siento su mirada sobre mí y yo miro al piso.

- ¿Qué quieres decir con eso?.

- Por Dios no te hagas como el que no sabe. - lo miró, confrontando cara a cara al hombre al quien le hice un daño. - Tu ya me reconoces, tu y yo ya nos habíamos visto.

Lo miro a la cara y su rostro parece que dijera "Este pendejo que está diciendo".

- Mira César, no te entiendo a lo que te refieres, no te conozco y no recuerdo haberte visto en otro lado.

Estoy confundido y sigo mirándolo, apunto de decirle que era uno de los tipos que lo asalto pero por arte de magia me acuerdo que yo traía una máscara que era para cubrir mi cara, hasta recordando la frase de "No seas puto César, hazlo como los machos sin máscara" dicho por el Dylan.

- Según tu, ¿En dónde nos vimos?

Y trato de tragar mis palabras para no decir mi más grande verdad, a su vez que es un enorme crimen.

- En la inmobiliaria de mi mamá ... - me sigue mirando. - Si, ahí, creo que ...

Estoy pensando en que le diré, empiezo a recordar anécdotas de mi mamá sobre su nuevo trabajo pero que tengan que ver con el.

- Si, yo te vi ahí una vez que fui a visitar a mi mamá pero creo que no te acuerdas porque estabas atareado ese día.

Y sonrío esperando a que lo creyera, solo me mira sin decir nada, escuchamos los dos un "el que sigue", al mirar en frente estaba libre para que pasáramos.

Una mujer atendía el puesto, ella hacía los elotes preparados y los esquites.

- ¿De qué quieres tu elote? - el pregunta.