Cap 7 °Susurros de Calidez°

70 16 2
                                    


La habitación era exactamente lo que esperaba de alguien como Phasma. Ordenada, sin lujos innecesarios, pero con una atención al detalle que reflejaba su carácter meticuloso. Me sentí aliviada al encontrar un pequeño escritorio donde podía revisar los datos y análisis que había recopilado durante la crisis. Me senté, sacando mi consola portátil para repasar la información y asegurarme de que todo estuviera en orden. Sin embargo, mientras lo hacía, mi mente volvía una y otra vez a Phasma, a su ojo azul que había visto a través del casco dañado, y a la extraña conexión que parecía haberse formado entre nosotras.

No podía negar lo que sentía. Había algo en Phasma que me atraía, que me hacía querer conocerla más allá de la armadura y las órdenes. Era una líder formidable, pero también una persona con una complejidad que me intrigaba profundamente. El tiempo pasó mientras revisaba datos y trataba de mantener mi mente enfocada en la tarea en cuestión. Sin embargo, no podía evitar preguntarme qué estaba sucediendo en la sala de interrogatorios. ¿Qué estaría haciendo Phasma en ese momento? 

Al recostarme en la silla del escritorio, comencé a inspeccionar la habitación de Phasma, dejando que mi atención se deslizara por cada detalle. La habitación, aunque funcional y minimalista, tenía un sentido de orden que reflejaba perfectamente a su ocupante. Los estantes meticulosamente organizados y la cama impecablemente hecha demostraban la disciplina de la capitana. A medida que los minutos pasaban, sentí cómo el agotamiento comenzaba a invadirme. La suave comodidad de la silla era un alivio bienvenido después del caos del día. Mis párpados se volvieron pesados y, aunque traté de mantener la concentración, finalmente el sueño me venció. Mi cuerpo se relajó, y antes de darme cuenta, estaba profundamente dormida. Mi respiración era suave y tranquila en el silencio de la habitación.

......

Algunos momentos pasaron en silencio, la habitación bañada por la luz tenue del monitor encendido sobre el escritorio. Phasma entró en la habitación y se detuvo al ver a Nebula dormida en la silla, con una leve sonrisa en su rostro. Era evidente que el día había sido agotador para ambas, pero ver a Nebula descansando le brindó a Phasma un inesperado sentido de calma.

Phasma dejó escapar un pequeño suspiro y se quitó el casco con cuidado, colocándolo sobre la mesa junto con los guantes. Sus manos, ahora libres, pasaron por su cabello rubio platino mientras se acercaba a Nebula con pasos silenciosos. Observó a la chica dormida por un momento, notando la expresión de paz en su rostro. Era una visión sorprendentemente tierna y completamente diferente de la guerrera decidida que había visto en acción solo unas horas antes. El contraste hizo que Phasma se sintiera extrañamente protectora.

Con movimientos cuidadosos, Phasma se inclinó y levantó a Nebula en sus brazos, sorprendiéndose de lo ligera que era. Nebula murmuró algo en sueños, acurrucándose instintivamente contra el pecho de Phasma mientras era llevada hacia la cama. Phasma la depositó suavemente sobre las sábanas, asegurándose de que estuviera cómoda antes de cubrirla con una manta ligera. Se quedó un momento observando cómo Nebula se acomodaba, todavía en su mundo de sueños.

El simple acto de cuidar a alguien, de mostrar un lado más humano, era algo que Phasma no hacía a menudo. Su vida había estado tan dedicada al deber y al liderazgo que momentos como este se sentían inusuales pero reconfortantes. Mientras miraba a Nebula, Phasma se permitió reflexionar sobre los eventos del día. La joven ingeniera había demostrado no solo habilidades excepcionales sino también una valentía que resonaba profundamente en ella. Había algo en Nebula que la intrigaba y desafiaba sus propias percepciones y creencias.

Con un último vistazo a la chica dormida, Phasma se alejó y se sentó en la silla que Nebula había ocupado momentos antes. Se permitió un breve momento de descanso, dejando que la tensión del día se disipara lentamente. Phasma se quedó en la silla, su propio cansancio alcanzándola. Sus pensamientos vagaron mientras observaba a Nebula dormir. Era una extraña sensación de calma después del tumulto del día, así pasaron algunos momentos y mientras la chica dormía en su cama sintió un leve movimiento.

¡Please, Please! °Capitán Phasma x Lectora°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora