Beomgyu encendió la lámpara junto a su cama y sacó el lubricante y un condón de su mesa de noche. Los arrojó a la cama, donde yacieron prueba de lo que estaban a punto de hacer.
Inevitablemente, la repercusión de su decisión acentuó la importancia de sus acciones, el aire entre ellos se sintió tenso, y el peso de sus deseos cambió la forma de pensar de ambos.
El hambre mutua seguía ahí, persistente e insolente, pero, repentinamente, el temor los embargó a ambos y Yeonjun y Beomgyu se encontraron temblando por los nervios.
Todo esto era nuevo para ellos, incluso si el contacto íntimo con el otro les era familiar.
Se desnudaron lentamente entre besos. Y, aunque tardaron más de lo necesario debido a las manos temblorosas y los nervios, cuando finalmente estuvieron desnudos, se ubicaron en la cama.
Impaciente, Beomgyu le dio a Yeonjun la botella de lubricante, esperando que él empezara con la acción y que así, por fin, la timidez abandonara sus cuerpos, pero, por un largo instante, no sucedió nada.
Por lo que pareció una eternidad, Yeonjun permaneció mirando la botella como si fuera una bomba a punto de detonar, entonces dijo: — No sé qué hacer. No quiero hacerte daño.
La inseguridad en su voz movió fibras desconocidas en el corazón de Beomgyu, así que, sin darse cuenta y descartando su propio temor, le aseguró a Yeonjun con voz firme: — No me lastimarás si tenemos cuidado. Claro, probablemente dolerá un poco al principio, pero quiero intentarlo de todas formas.
Beomgyu casi no podía creer que esa seguridad proviniera de su voz, no podía creer que estuviera pidiendo esto.
Y así, por primera vez, notó que ellos habían recorrido un largo camino en pocas semanas, pero, aunque era un poco apresurado, él de verdad quería hacer esto con Yeonjun, sentirlo de esa manera.
Entonces nadie podría quitarle esto. El recuerdo se quedaría con él pasara lo que pasara en el futuro.
Sin embargo, pese a sus palabras de ánimo, Yeonjun todavía dudaba; parecía perdido, pequeño y fuera de su zona de confianza. Así que Beomgyu tomó el control de la situación: agarrando el lubricante en su mano dobló su pierna hacia arriba para empezar a prepararse a sí mismo.
Tumbado de costado, de cara a Yeonjun, Beomgyu acercó sus dedos resbaladizos hacia su agujero. Primero lo rodeó, temblando ante el placer de tentar a su agujero, luego siseó mientras empujaba dentro su dedo y sentía ese primer estirón en su ano que era ardiente y doloroso.
—Joder — bufó Yeonjun. — ¿De verdad, tú te estás... para mí?
Beomgyu no pudo evitar sonreír ante la adoración en la voz de Yeonjun, y simplemente continuó preparándose.
—Dios, ese agujero se ve tan bien. ¿Cómo puedes estirarlo así? — Preguntó Yeonjun, su voz salió algo estrangulada.
—¿Quieres intentarlo por mí? Es jodidamente incómodo poner tus propios dedos, siempre hace que me quede doliendo el brazo por la posición.
Además, los dedos de Yeonjun eran más largos y gruesos. Beomgyu pensó que sería un buen ejercicio tomarlos dentro suyo antes de siquiera intentar lidiar con el tamaño de la polla de Yeonjun.
Yeonjun tragó saliva y asintió con la cabeza, pareciendo demasiado perdido para las palabras.
Entonces Beomgyu rodó sobre su estómago y abrió las piernas para Yeonjun , inclinando sus caderas hacia arriba. Un momentáneo rubor coloreó su rostro al pensar en lo incorrecto del momento, en lo sucio que parecería estando boca abajo y con el culo expuesto para otro hombre.
ESTÁS LEYENDO
Playing with My Heterosexual Friend (Yeongyu)
RandomHISTORIA CON CONTENIDO ADULTO, SI NO ES DE TU AGRADO ES MEJOR QUE NO LEAS Dos compañeros, con mucha curiosidad y estando solos, ¿qué malo podría pasar? *Obra Adaptada *Todos los derechos y créditos a: Autor correspondiente *Fanfic Yeongyu *Yeonjun...