Lazos de Luna

CAPÍTULO 9

ALEXIA

Dentro de la casa, todos nos dirigimos al comedor donde ya estaba todo listo, tomamos asiento en nuestros lugares, donde yo quede entre mi madre y Axel, los Blood , estaban a nuestro lado y los Line del otro lado de la mesa junto a los hermanos Herbert, el señor Jacob y la señora Tamara presidian la mesa por otro lado, Tyler y su novia estaban sentados uno al lado del otro y el corazón se me compromiso ante esto.

Empezamos a comer y las conversaciones fluyeron, la comida estaba deliciosa y yo no pude evitar comer con emoción, de repente me di cuenta de que alguien no lo hacia y no fui la única que lo noto–Dua, cariño ¿No te gusto la comida?,  es que no has probado más de dos bocados–la voz preocupada de la señora Tamara se escuchó en la mesa y todos giraron su mirada hacia la rubia menor. La mire por unos segundos, Dua traía puesto hoy un vestido blanco muy lindo ceñido a su cuerpo con mangas transparentes.

El vestido le quedaba de maravilla, pero si es cierto que resaltaba su notoria delgadez un poco fuera de lo común.

–No, no, la comida está delicioso es solo que no tengo apetito–dijo estás nerviosamente.

–Igual que toda la semana–exclamo Tyler tomando un sorbo de jugo–has pasado toda la semana de la misma manera, incluso te has desmayado alrededor de 5 veces en lo va de semana–las palabras de Tyler se escuchaban enojadas, supongo que le dolía ver a su novia en ese estado.

–Cariño, no creo que sea un tema que debamos hablar en la mesa–musito Dua con un tono paciente hacia su prometido, este solo suspiro y negó con la cabeza.

–Diosa mia, eso es preocupante, ¿No han ido al médico?– siguió cuestionando la madre de Tyler.

–La lleve a la fuerza, pero entro sola y no quiere decirme que es lo que le dijo– le contesto su hijo.

–Te dije que no es nada del otro mundo simplemente nervios de novia–respondió está ya en un tono más elevado.

–Mi princesa, está bien, simplemente es el régimen de dieta que lleva a causa del ballet, apenas la está empezando y es normal que el cuerpo tarde en acostumbrarse, es todo–las palabras de Diana dieron por acabada la conversación y todos volvimos a comer.


El ambiente había vuelto a ser más ameno, habiendo olvidado la reciente discusión, pero esa paz no duró mucho más, pues cuando Jacob le pregunto al señor Hermes como iban las cosas en su empresa todo se salió completamente de control–Mejor que nunca, mi hija a hecho un estupendo trabajo en las vinícolas, nos ah colocado en el número 1 mundial y no tengo duda de que nos mantendremos hay por mucho tiempo–dice este viendo con una sonrisa a su hija que ella corresponde– los Blood nos hemos esforzado mucho por mantener nuestro legado y eso es algo que mi hija siempre lleva muy presente, estoy muy orgulloso de ella.

–Legado construido a base de sangre, claramente eso es muy digno– el comentario venenoso de la rubia mayor hizo tensar por completo a la mesa, los Blood tensaron sus gestos y los Herbert lucían avergonzados.

Estábamos en un sepulcral silencio, solo se oía la risa mal disimulada de Diana, hasta que la voz de Hailee se hizo imponer– Es curioso que hable sobre nuestros orígenes, señora Line. Ya que los suyos no son tan intachables como quiere hacer ver–las palabras de Hailee hicieron tensar a la mujer que trato de intimidarla con la mirada, cosa que no logro pues Hailee siguió hablando– Creo a ver leído en uno de los libros de historia más antiguos  de esta época sobre una bruja, dicha bruja fue quemada por ocultismo, tratos con entes demoniacos, magia negra, esta mujer aterrorizo a todo su pueblo por sus prácticas, ya que se rumoreaba que sacrificaba a sus animales, incluso niños para mantenerse joven y alimentar su poder, como ya dije ella fue quemada por la santa inquisición en la plaza central en Rumania. ¿Por qué les digo todo esto?, sencillo. El nombre de esta mujer era Rowena Plainacher, ¿Qué no es este tú apellido de soltera, Diana?– Hailee suelta una risa malvada–si lo es, tú linaje, Diana. Está plagado de brujas, magia negra y pactos con demonios. Tú linaje si está manchado, mi apellido, mi familia es de orígenes honrados, nos remontamos a décadas de realeza vampírica, fuimos y somos amados por nuestro pueblo, no puedo decir lo mismo de ti, ¿Cierto?, después de todo si estás aquí es por tu hija y solo por tu hija.

–¡Mocosa malnacida!, ¿Cómo te atreves a hablarme así?–las palabras alterada de Diana resonaron en la mesa igual que el golpe que le dio a está– es mentira, mi familia es de orígenes albaneses, no tenemos nada que ver con Rumania

–Solo digo la verdad, alrededor de los años 1600 que fue cuando la gran quema de brujas estuvo en su pleno apogeo, su familia no tuvo más opción que emigrar y esconderse, pero claro sin dejar sus artes.

–Maldita mocosa.

–Ya te lo deje pasar, no te permito que insultes a mi hija, Diana. Ella solo dice la verdad y tú lo sabes bien–la fuerte de voz de Hanna, junto a una mirada completamente fría hicieron empequeñecer a Diana, que viendo que no podría ganar esta discusión solo atino a salir hecha una furia de la mesa.

El silencio volvió a tomar la habitación, silencio podría cortase con un cuchillo y era terriblemente incómodo.

–Vaya, no estaba enterado nuestra familia fuera un linaje de brujas–el comentario sarcástico del hermano de Dua fue el primero en romper el terrible silencio.

–Lamento mucho los comentarios de mi esposa, Hermes y también que haya arruinado la reunión, Jacob. Me siento muy avergonzado– musitó el señor Line pidiendo disculpas en nombre de su esposa.