~Little Flower~
Me desperté con el bullicioso ruido qué provenía de la sala de estar, unos cuantos gritos que se disfrazaban de murmullos por la lejanía de una sala a otra me sacaron de mis pensamientos, mi corazón comenzó a acelerarse pensando en las posibilidades de lo que podría estar pasando ¿papá se habría enojado?¿Mamá? ¿Hice algo malo?. Mi mente comenzó a dar vueltas pensando qué podría haber hecho mal, o peor, ¿James hizo algo?.
Mis pequeños pies descalzos sintieron el frio suelo y mis brazos me ayudaron a levantarme de mi cama, caminé hacia la puerta siendo lo más silenciosa posible y mi mano se dirigió hacia el picaporte tirándolo hacia abajo.
- No -me dije a mí misma obligandome a soltar suavemente el picaporte de mi mano. James siempre solía decirme que cuando escuchara gritos en casa me quedara en mi habitación y jugara a las muñecas o algo así. Pero mi curiosidad me estaba comiendo por dentro y necesitaba saber que estaba ocurriendo. Pegué el lado derecho de mi rostro en la puerta y fruncí ligeramente el seño tratando de escuchar de qué se trataba, un pequeño escalofrío recorrió mi cuerpo cuando escuché pisadas rápidas encaminadas hacia donde me encontraba. Antes de que pudiera retroceder lo suficiente hacia mi cama vi mi puerta abrirse de un golpe, cerré los ojos esperando lo peor, pero no, solo era James, solté un ligero suspiro que no sabía que tenía retenido hasta ese momento. Mi tranquilidad no duró mucho al ver la cara asustada de mi hermano mayor.
- Emma...- dijo suavizando su rostro al verme un poco atemoriza - T-tenemos que...- pensó sus palabras, avanzó hacia mí armario donde posaba mí mochila de la escuela y se dirigió a mí cama donde sacó rápidamente todas la pertenencias escolares.
- James ¿Que pasa? - dije suave mientras jugaba con mis dedos nerviosamente.
Dejó mí mochila a un lado - Te explicaré luego ¿De acuerdo? - peino mí cabello con su mano y camino por mí costado dirigiéndose a la salida -Guarda un poco de ropa y cosas que necesites, volveré en un minuto- dijo mirándome con una pizca de preocupación en sus ojos, di un pequeño asentimiento antes de que el desapareciera por mí puerta.
El miedo invadió mí cuerpo mientras tomaba mi ropa del armario y comenzaba a guardarla¿Porque James me pedía que guardara mis pertenencias? ¿Nos escapabamos de mamá y papá? Me pregunte metiendo rápidamente unas camisetas y pantalones en la pequeña mochila de mariposas, odiaba tener que dejar mis pocos juguetes, pero no había espacio para ellos, guardé algunas cosas más y decidí cambiarme de ropa, ya que todavía tengo puesto mi pijama. Pronto James apareció con una mochila colgada en su hombro y me ayudó a terminar de empacar, tomé su mano para salir rápidamente de mí habitación.
-¡Daysi!- dije soltando su mano para volver corriendo a donde yacía mi muñeca, justo donde la había dejado, no podía dejarla, no podía abandonarla, tome la muñeca de tela rodeándola con un brazo y la apreté fuertemente contra mi pecho antes de salir.
-¡De prisa idiotas!- Escuché a papá gritarnos, rápidamente taché la idea de que estábamos escapando y mí cabeza volvió a llenarse de preguntas - No tengo todo el día - añadió. Sentí la mano de James empujandome suavemente detrás de mí espalda para ayudarme a acelerar el paso. Al salir los rayos de sol me hicieron entrecerrar los ojos, ajuste mí vista y pude ver nuestra vieja camioneta estacionada en el puente de nuestra casa, seguí a James hasta ella, papá estába cargando unas últimas pertenencias, se veía enojado o de mal humor, quizás ambos, pero de igual manera no era recomendable hablar con el cuando estaba así.
- Mierda..- escuchaba a mí padre maldecir en susurros. James me ayudó a subir a la parte trasera de la camioneta, el subió después de mí, acomode a Daysi a mí lado alisando su pequeño vestido verde claro y acomodando sus cabellos salidos de la trenza. Di un pequeño salto al escuchar el fuerte ruido de un portazo que dio mí padre al subir al vehículo, comprendimos camino.
Mí boca estaba ligeramente abierta al mirar por la ventanilla, gente gritando, corriendo, llorando, no podía entender nada ¿Que estaba pasando?.
-¿Donde esta mamá?- finalmente pregunté.
-¿Crees que lo se?- respondió papá con tono de fastidio -esa perra puede estar en cualquier lado- dijo tratando de mirar a la carretera mientras rebuscaba en sus pantalones una caja de cigarrillos y un encendedor. Odiaba que papá fumara, el humo me hacía toser mucho y no me gustaba para nada el olor, además, una vez escuché que el humo le hace mal a los insectos, y las mariposas son insectos, si las mariposas se extinguieran por el humo de papá, me enojaría muchísimo.
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Estamos atascados.
Hay muchos autos, muchas personas, mucho ruido y me estoy poniendo nerviosa, puedo ver qué papá también y no es buena noticia. El tráfico es largo, los autos no avanzan y muchas personas ya están fuera de sus vehículos con caras preocupadas, eso me asusta mucho.
- Vayan a estirar las piernas o algo así - escuché decir a papá sin siquiera mirarnos, sus ojos fijos en la carretera, sus manos reposaban con un agarre fuerte sobre el volante, miré a James quien solo abrió la puerta de la camioneta y de un salto ya estaba abajo con su mano extendida para que la tomara, agarré a Daysi por su cintura y salí al exterior.
Caminamos un poco, tratando de averiguar que esta pasando realmente, pero nadie parecía dar una respuesta. James me sujeta fuerte de la mano para que no la soltara y me perdiera, se que el esta asustado pero no lo demuestra.
-¡Ese idiota tiene mis cosas!- Escuchamos a lo lejos, rápidamente giramos nuestras cabezas al lugar de dónde provenían las voces, dos hombres se estaban gritando, quizás a unos 10 autos de distancia de dónde me encuentro -¡Hijo de puta!- dijo antes de abalanzarse hacia el otro hombre y comenzar una pelea, el agarre de James se hizo más fuerte y comenzó a tirarme.
- Vamos...- James suspiro y acompañe su caminata, nos dirijamos a la camioneta, pero no puedo dejar de observar nuestro alrededor, tengo miedo, mucho miedo¿Que está pasando?¿Porque James no me dice nada?, el agarre de James se fue aflojando hasta soltarme, eso me hizo salir de mis pensamientos, James corrió y abrío la puerta antes de adentrarse tan rápido como pudo, lo observé mirar el lugar y buscar algunos objetos.
El miedo invadió mí cuerpo, no veía a papá dentro de la camioneta, no estaba en el asiento del conductor y el tenía que estar ahí¿Donde está?, quizás salió a fumar, eso espero porque aunque no me gustará mucho estar con el, el era mí papá y lo necesito. Escuché a James soltar un pequeño grito de frustración y golpear el asiento antes de bajarse derrotado del vehículo con nuestras mochilas en su hombro, mis ojos se llenaron de lagrimas que peleaban por salir pero traté de controlarlas. Caminé torpemente hacia James y al llegar a su lado tiré su manga hasta que sus ojos se posaron en mí.
-¿Donde está papá?- pregunté, mis manos temblaban suavemente, James se agachó hasta quedar a mí altura, colocó su mano en mí cabello y me atrajo a su pecho.
- Papá... no está - soltó después de unos minutos, dejé escapar un lágrima que recorrió mí mejilla y abracé aún más fuerte a mí hermano. Papá decía que llorar era de bebes, siempre que me lastimaba trataba de no soltar lágrimas para que no fuera peor, pero ahora no puedo evitar hacerlo, estoy muy asustada, papá nos abandonó y ni siquiera se dónde esta mami - Tranquila...- dijo acariciando mí espalda, solté un sollozo - Estaremos bien ¿Si? - Asentí rápidamente mientras secaba con mí ropa las lágrimas que había soltado - Estaremos bien - suspiro tratando de convencerse a si mismo.
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Pequeño prólogo para comenzar la historia de la pequeña Emma, estoy muuy emocionada.
Espero que la historia les guste tanto como a mí me está gustando escribirlaa.
Porfis, vota y comentá, me encanta leer los comentarios, no tengas miedo de corregirme, lo entiendo.
Por último, James te amo.
Besos en la cola.
Morex
