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Nicole Miller
Luego de que terminara mi recuperación llegué a casa dónde mi madre me llevo de compras para elegir un vestido perfecto para la noche de hoy junto a unos tacones que al momento de probarmelos hizo que dudará si de verdad quería ir
—Te ves hermosa —Dijo mi madre emocionada
La rubia se alejo de mi luego de acomodar mi cabello por milésima vez, me mire al espejo quedando sorprendida al ver mi aspecto
Mi cabello estaba peinado en unas ondas que caían por mis hombros y espalda dándole un aspecto elegante pero a la vez delicado, el vestido era negro ajustado a mí cuerpo hasta la cadera luego se ensanchaba un poco hasta mi tobillo con una abertura en mi pierna derecha donde se podían ver los tacones suela roja de Saint Laurent que me había comprado mi madre
El escote era recto sin mangas pero no tan pronunciado ya que no se podía ver mi cicatriz, mi rostro estaba más maquillado de lo usual ya que mi madre me había llevado anteriormente a un salón, una delicada pulsera de oro adornada mi mano izquierda
—Creo que tienes razón —Murmure mirándome en el espejo
Mis ojos resaltaban mas gracias a él maquillaje de ojos haciendo que mi mirada fuera penetrante pero sin quitarme mis facciones de niña
—Lo estás cariño, ya sabes si te sientes mal llamas y... —La interrumpi
—Estare bien mamá —Dije abrazándola
La mujer me aceptó el abrazo gustosa, luego de unos segundos nos separamos al escuchar voces abajo
—Ya llegó —Chillo emocionada
Mi madre me acompaño hasta las escaleras donde pude ver a Walker charlando alegremente con mi padre. Baje cuidadosamente las escaleras para no romperme algún hueso
El rubio se giro hacia donde me encontraba dejando ver un gran ramo de rosas. su expresión era inolvidable sus ojos estaban más abiertos de lo normal y sus labios formaban una pequeña o
Cuando termine de bajar de más escaleras ví como mi padre le daba un empujoncito a Walker para que se acercara a mí ya que estaba paralizado rei al ver la escena
El rubio se acercó lentamente hacia mi entregándome el ramo el cual agarre gustosa regalandole una gran sonrisa
Nunca había visto a Walker tan elegante, el rubio vestía un smokin negro junto a un corbatín del mismo color, mire hacia abajo. Rei al ver sus vans negras
—Te ves hermosa —Dijo con dificultad
—Tu también te ves bien —respondi mirándolo
Un flash nos cegó ambos giramos asustados, nos tranquilizamos al ver que eran mis padres sacándonos fotos
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