Al llegar a la entrada del establecimiento, nos recibió una camarera, que para mi gusto, estaba siendo muy coqueta con MI alfa. De pelo castaño largo y suelto, sus ojos eran de un color café claro, vestía con la típica falda negra, una blusa blanca de botones, medias blancas largas y zapatos cerrados color marrón.
Tenía un maquillaje simple y sonreía como si fuera una niña, a la cual le acaban de dar el mejor regalo de su vida.
Maldita zorra.
Nos llevó hacía la mesa en la que podíamos sentarnos. Luego de dejarnos a ambos el menú y de guiñarle un ojo descaradamente a mi alfa, se fue.
La seguí con la mirada furioso, pero decidí calmarme. Más tarde le daré su merecido, o si.
Por otra parte mi alfa solo estaba concentrado en su teléfono y en acariciarme la mano, su mirada estaba en el teléfono pero aún así, no dejaba de acariciarme. Sonreí por eso.
Pero... tengo curiosidad.
— Hannie, ¿que estás viendo? —él levantó la vista y me miró con una sonrisa. Extendió su mano y me mostró una foto, en el cual se veía como yo estaba durmiendo mientras había un poco de saliba escurriendo por mi labio.
Inmediatamente me sonroje y comencé a tratar de agarrar su teléfono; cosa que se me hizo imposible ya que levantó su mano y como yo soy un tremendo flojo y, para colmo, enano, no quise levantarme de mi asiento para cogerlo y me di por vencido.
Él solo sonreía como si hubiera ganado una pelea. Esa sonrisa de suficiencia me enojó, maldito alfa.
— ¿No vas a seguir intentándolo, bebé? —maldito, se que disfruta verme “enojado”, si porque en realidad no lo estoy. Solo quiero evitar que ponga esa foto de fondo de bloqueo o de inicio.
Hay, si lo hace morirás de la vergüenza por el resto de tu vida.
Callate maldito pulgoso.
¡A mi no hables de ese modo enano, que yo no soy un puto perro!. ¡Soy un lobo, no un perro!.
Simplemente lo ignoré.
Luego recordé a la maldita zorra que había ido en dirección al baño. Ya han pasado unos minutos y no la he vuelto a ver, lo que significa que aún debe seguir ahí.
Perfecto.
— Hannie, voy al baño, no demoro... tanto —mi alfa me miró al instante.
— Ok, yo me encargo de pedir —me sonrío y llamó a un camarero que se encontraba cerca de nuestra mesa.
Caminé en dirección al baño, al llegar mire ambos lados, no me gustaría quee vieran entrando al baño de mujeres. Por Dios, moriría de la vergüenza.
Entre decidido al baño y cerré la puerta detrás de mi con seguro. Me encamine hacía los cubículos y gracias al aroma de la zorra, supe que se encontraba aquí. Comencé a seguir el olor de su aroma hasta quedar al frente de uno de los cubículos. Sonreí de lado al pensar en lo que le haría, ahora mismo, a esta zorra tabla de planchar. Porque está más plana que una tableta de surf.
— ¿Hola?, no se si te confundiste de baño pero... este es el de las chicas, no el de los chicos —comencé a golpear la puerta de su cubículo, hasta que logré que lo abriera notando perfectamente su expresión asustada al verme.
— Hola de nuevo, zorra —sonreí de lado, enojado.
Sin mi siquiera pensarlo, agarre su pelo e hice que quedará parada. Le di la vuelta y hice que quedara de rodillas en el suelo frente a la tasa del baño. Impulse su cabeza hacía abajo de manera que parte de su cabeza quedó dentro de la taza.
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¡Solo follame! ❤️🔥ʜᴀɴᴋɴᴏᴡ❤️🔥
Fanfictionsᴏʟᴏ ᴅɪʀᴇ́ ǫᴜᴇ: sɪ ʟᴇs ɢᴜsᴛᴀ ᴇʟ ʜᴀɴᴋɴᴏᴡ, ᴇɴᴛʀᴇɴ ʏ ʟᴇᴀɴ. ʙʏᴇ :)🏃♀️ *ᴄ ᴠᴀ*