~𝐿𝑂𝑉𝐸 𝐼𝑁 𝐵𝐿𝑈𝐸 𝑁𝑂𝑇𝐸𝑆~ *𝚖𝚎𝚕𝚘𝚍𝚒𝚊 𝚙𝚛𝚘𝚑𝚒𝚋𝚒𝚍𝚊*

𝑁𝑂𝑇𝐴𝑆 𝐷𝐸 𝐸𝑁𝐶𝑈𝐸𝑁𝑇𝑅𝑂: Melodías y revelaciones.

Ｒｏｓｔｒｏｓ ｙ ｒｉｔｍｉｃａｓ~

La noche se había cernido sobre la ciudad, y Jungkook no lograba sacudirse la sensación de familiaridad que le inspiraba Taehyung, como si una fuerza magnética lo atrajera hacia él. Mientras se encaminaba hacia su apartamento, revivía el momento en que sus manos se rozaron, desatando una corriente eléctrica que le sacudió el cuerpo entero.

Al llegar a su hogar, Jungkook se sentó en el sofá, intentando comprender la emoción que latía en su pecho. En medio de su reflexión, su mirada se posó en el saxofón que reposaba en un rincón de la habitación, haciendo florecer una sonrisa en sus labios al recordar la conexión especial que había sentido con Taehyung en el bar. Quizás, solo quizás, aquel encuentro marcaba el inicio de algo hermoso.

Al día siguiente, Jungkook se dirigió al bar con la esperanza de encontrarse de nuevo con Taehyung. Sin embargo, al llegar, se percató de su ausencia. Inquirió al dueño del local, pero este solo se encogió de hombros con desdén. -No sé, ciclope. No he visto a ese tipo desde anoche. ¿Acaso tienes la ilusión de que ese productor se fije en un limpiador de mesas como tú?- expresó de manera despectiva hacia el joven Jungkook, quien se sintió confundido ante la insólita respuesta. -¿𝑷𝒓𝒐𝒅𝒖𝒄𝒕𝒐𝒓?- preguntó, revelando su desconcierto.

-¿Vives debajo de una piedra? El individuo de anoche es un destacado productor y músico que ha catapultado a numerosos artistas a la fama.- replicó bruscamente el dueño, sumiendo a Jungkook en una mayor confusión.

Jeon prosiguió con sus labores en el bar, pero el resto del día no cesó de dar vueltas en su mente a las palabras del dueño. Cuando llegó su hora de descanso, Jungkook no pudo resistir la curiosidad y decidió averiguar más sobre Taehyung.

Se encaminó al centro de la ciudad y se dirigió a un puesto de periódicos y revistas, hasta que finalmente lo encontró. Un artículo en primera plana sobre un prominente productor y músico reconocido como "𝕍", el cual había revolucionado la industria musical con su talento e innovación.

Jungkook se vio impactado al contemplar la foto de "V" en el artículo. ¡Era Taehyung! No podía dar crédito. ¿Cómo era posible que el hombre que había conocido en el bar fuera una celebridad?

Se sintió un tanto avergonzado por no haberlo sabido de antemano, pero él apenas veía televisión y rara vez escuchaba la radio. No había manera de que pudiera reconocer a Taehyung. Mientras absorbía el contenido del artículo, Jungkook experimentaba una creciente emoción. Taehyung era un genio, un artista innovador que había alcanzado logros extraordinarios en la industria musical. Jungkook se sintió atraído por su talento, su pasión y su dedicación.

Sin embargo, también se hallaba desconcertado. ¿Por qué se sentía así? A pesar de ser joven, nunca antes se había sentido atraído por alguien. No entendía lo que estaba sucediendo en su interior, y los prejuicios de la época no hacían más que alimentar sus dudas. Mientras reflexionaba, su estómago le recordó que era la hora de alimentarse, por lo que Jungkook pagó la revista y, al percatarse de que había agotado sus últimos wones en ella, encogió los hombros y se dispuso a ganar algo de dinero tocando su saxofón en la vía pública.

Entonando "Giant Steps" de John Coltrane, su artista favorito, Jungkook cerró los ojos y se entregó a la música, permitiendo que fluyera desde lo más profundo de su ser. Los transeúntes arrojaban monedas en el estuche del saxofón mientras él seguía tocando, hasta que una presencia detrás suyo le hizo abrir los ojos, era Taehyung parado allí, escuchando su música con una expresión de admiración. Jungkook se sonrojó, pero siguió tocando, perdido en la melodía.

Cuando terminó, Taehyung se acercó y le sonrió. -𝐄𝐫𝐞𝐬 𝐮𝐧 𝐯𝐞𝐫𝐝𝐚𝐝𝐞𝐫𝐨 𝐚𝐫𝐭𝐢𝐬𝐭𝐚.-, dijo. -𝐌𝐞 𝐞𝐧𝐜𝐚𝐧𝐭𝐚𝐫𝐢́𝐚 𝐞𝐬𝐜𝐮𝐜𝐡𝐚𝐫 𝐦𝐚́𝐬 𝐝𝐞 𝐭𝐮 𝐦𝐮́𝐬𝐢𝐜𝐚.-