DULCE BELLEZA (JENLISA ADAPTACION)

capitulo 170

"¡Sí, Ryan tiene razón!"

El hombre que estaba al lado de Ryan se volvió hacia Karina y se rió con picardía: "Si su hermano estuviera mirando desde la banda, ¡sería una sensación genial!"

"¡Entonces seré paciente y lo haré bien más tarde!"

Karina escuchó las palabras de los hombres y su corazón se hundió hasta el fondo. En ese momento, realmente no tenía más coraje para vivir. Mientras pensara que lo haría... Y frente a J-Hope... Este tipo de dolor y sufrimiento era peor que suicidarse.

De repente, un destello de crueldad brilló en sus ojos.

Karina abrió la boca y se mordió la punta de la lengua.

"¡Mierda! ¡Que alguien la detenga! ¡Quiere morderse la lengua y suicidarse!" Ryan se levantó rápidamente presa del pánico.

Uno de los hombres ya había pellizcado la boca de Karina con su mano para evitar que lo hiciera.

Karina sacudió la cabeza desesperadamente y trató de liberarse del agarre del hombre.

Preferiría morir ahora que morir cuando llegara J-Hope.

De esa manera, sería menos dañino para ella y J-Hope.

Ryan vio los pensamientos de Karina y le dijo al hombre que estaba a su lado: "Ponle algo en la boca. ¡Con esto no podrá morderse la lengua y suicidarse!"

"¡Lo tengo!" El hombre miró a izquierda y derecha, pero no encontró nada que poner en la boca de Karina. Finalmente, se quitó el calcetín y miró al hombre que había apretado la boca de Karina. El hombre le abrió la boca a la fuerza y le metió el calcetín en la garganta.

De repente, un sabor picante entró en la boca de Karina. Sintió náuseas y su estómago comenzó a revolverse. Pero tenía la boca amordazada y no pudo hacer nada más que soportarlo.

En ese momento, ella estaba sentada en una silla y sus manos y pies estaban atados con cuerdas. Incluso su boca estaba bloqueada con el calcetín sucio y no podía soportar el sabor, no rogaría por la muerte.

Este tipo de desesperación cubrió el cielo y la tierra mientras se precipitaba hacia el corazón de Karina. Su corazón murió en ese momento, y aunque sus ojos estaban abiertos, ya no tenían ninguna expresión. Eran como el agua de un estanque muerto y ya no podían provocar ninguna onda.

oooo

En el hospital.

Después de que Félix colgó el teléfono, sintió como si le hubieran disparado una metralleta en los pulmones. Dejó escapar una bocanada de aire. Se tapó la boca y tosió.

J-Hope sintió dolor en su corazón cuando vio esto.

A este hombre parecía gustarle su hermana más de lo que había imaginado.

—Félix —J-Hope respiró profundamente—. Ya no tienes que preocuparte por esto. Ayúdame a llamar a Taeyang y pedirle que retire a todos los guardias de afuera.

"¡Tos! ¡Tos! ¡Tos!" Félix se sentó en la silla, cubriéndose la boca con una mano y agarrando la sábana con la otra. Tosió como si fuera a perder la vida. Tosió hasta que se le saltaron las lágrimas de los ojos.

Sacudió la cabeza obstinadamente. "¡Tos! ¡Tos! ¡Tos!"

J-Hope finalmente no pudo soportarlo más. Gritó a las dos enfermeras que estaban de pie en la parte de atrás, observando el espectáculo: "¿Qué están haciendo ahí paradas? Vayan a traerle un vaso de agua tibia y denle palmaditas en la espalda. ¡Ayúdenlo a respirar!".