Parte 11

510 44 7
                                    

________ pov

Yo no sabía cómo Billie podía quitar su caparazón por momentos y luego ponerla como si jamás la hubiese quitado. Ya llevábamos meses con esa "relación" de ¿Amigas con derechos? ¿jefa y empleada con derechos? O lo que sea que era y habían pasado exactamente dos meses y diez días desde que me besara.

Todo estaba bastante personal ahora, teníamos el lugar aquel de las cabañas como nuestro espacio secreto, pasábamos ahí los fines de semana, haciendo de todo, comiendo e incluso conversando. Billie se volvía otra persona cuando estábamos solas, cuando no tenía que huir de mi papá y en esos momentos me gustaba más que nunca.

Me sonreía siempre y tenía una hermosa versión solo para mí. No nos habíamos besado de nuevo y tampoco hablamos de ello, pues habíamos hecho una promesa. Aunque anhelaba que me besara otra vez

No se había acurrucado conmigo jamás, como lo decían las reglas y tampoco hablamos sobre sus cicatrices. Cada vez que sentía que ella abría las puertas de su corazón y su mente algo la cerraba inmediatamente.

Siempre dije que solo quería obtener una noche con ella, pero en ese punto ya había tenido muchísimas noches con ella, la había tenido en todos los espacios físicos posibles y no me sentía satisfecha, más bien cada vez quería más de ella.

Era fin de semana a las 8 de la noche, estaba en mi bañera casi dormida cuando entró una llamada a mi celular.

—Hola

—Nena

—¿Qué tal? —pregunte sonriendo cómo tonta

—Hoy tuve una reunión de mierda ¿Paso por ti en 10? —se escuchaba frustrada y cansada

—Claro, te espero

La llamada terminó y yo me terminé de duchar. Decidí dejar mi cabello suelto porque estaba húmedo y porque sabía que le encantaba. Me puse unos shorts cortos y una camisa celeste, además mis tenis blancos.

Cuando bajé las escaleras me quedé congelada al ver a papá borracho siendo básicamente arrastrado por la secretaría.

— ¿Está todo bien?

—Está todo genial ¿Por qué crees que no? —dijo casi inentendible

Una ola de preocupación sacudió mi cuerpo.

— Está bien ________. Solo bebió de más —hablo la rubia

Ella últimamente estaba viniendo mucho a nuestra casa. Ellos tenían algún tipo de relación que no entendía pero que realmente no me importaba

—Cuida de él —dije pasando por su lado

—Tu cuida de ti... y de mi...—hablo mi papá

Me giré para mirarlo confundida, pero ellos ya habían desaparecido en las escaleras. Estuve afuera 8 minutos hasta que ella llegó. Le Hice una seña de silencio que le hacía cuando papá estaba en casa así que no se bajó del auto y esperó a que me subiera para salir lejos de ahí. Una vez la tensión de huir se fue, me giré y la vi con un traje café y aspecto cansado.

—Hola —dije mientras me estiraba para besar su hombro

—Hola —dijo ella y acaricio mi pierna en forma de saludo

El viaje fue silencioso hasta llegar al hotel que siempre frecuentamos. Nuestra cabaña ya tenía incluso cosas de nosotras, porque Billie era tan asquerosamente rica que había alquilado casi "permanentemente" esa cabaña, así que nadie la usaba además de nosotras.

Cuando entramos me quede tirada en la cama mientras Billie estaba en el baño. No sabía porqué exactamente, pero Billie siempre se tomaba un momento de paz en el baño antes de estar conmigo.

La socia de papá | Billie Eilish G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora