Pasaron algunos días desde que Alex había regresado al departamento, todo parecía que estaba marchando con normalidad, solo que Alex y Tay no podían estar en el mismo espacio
Una mañana Alex se levantó antes que todos, trato de bajar un plato del estante, se escuchó un ruido que levanto a Tay
- ¿Qué estás haciendo?
-lo siento, no quería levantarlos, quería preparar el desayuno
-con ese brazo lo único que vas a causar son problemas –Tay le quito el plato y empezó a preparar el desayuno
Ambos estaban callados hasta que Alex decidió hablar – quería…
-No es necesario que hablemos sobre eso
-Aun así…
-No huiste eso es lo que importa
-gracias
-pero no cambia que sigues siendo enana – le sacude el pelo y sonríe
-muy gracioso
Pasaron algunas semanas de mucho trabajo y esfuerzos de todos, Nathan entro a la habitación de Alex
-hola, espero no interrumpir
-claro que no
-al fin ya te pudiste recuperar de tu brazo
-sí, era una molestia
-sabes quiero invitarte a cenar para poder celebrar que estas de nuevo aquí
- seguro
-muy bien, te deje un regalo que me gustaría que usaras
-ok
-te veo a las 7:30
-está bien
Alex se alisto y vio el regalo que Nathan le dio, era un vestido muy hermoso color morado, se lo coloco, se alisto, cuando salió todos se quedaron muy sorprendidos
-Alex, te ves muy linda – sonreía Dylan
-eres la chica más bonita que he visto, eres… eres...
-Me voy a poner celosa Matt
Al verla Tay se quedó muy sorprendido de como lucia, sus ojos se quedaron abiertos de par en par
-Tay verdad que se ve muy linda – Hana sonreía
-te, ves muy linda
-gracias, bueno me voy
-diviértete
Llego al restaurante y vio que era un lugar muy hermoso y caro, entro algo confundida, vio a Nathan muy bien vestido
-hola, siéntate
-gracias
- ¿te gusta?
-sí, es muy lindo, creí que solo sería una pizza
-bueno… es que en realidad te quise invitar por una razón muy importante
-dime
Nathan tomo de las manos a Alex - eres muy importante en mi vida, jamás creí que volvería a sentir este amor que creí que jamás volvería a sentir
Alex se quedó en shock solo recordando ese beso en su fiesta de cumpleaños
-no me tienes que decir nada, vamos a cenar
La cena se desarrolló bien, aunque Alex no estaba cómoda, cuando terminaron salieron del restaurante
- ¿nos vamos?
-si no te molesta quisiera estar sola
- ¿estas seguras?
-si
-ok, regresa pronto por favor
-no te preocupes
Alex comenzó a deambular hasta que encontró un bar cerca, cuando Nathan regreso todos se quedaron confundidos porque venía solo
- ¿y Alex?
-no ha regresado, dijo que daría una vuelta y regresaría
-no debiste dejarla sola
-no me quedo de otra
Bueno, vamos a buscarla, no debe de estar lejos
Todos fueron a buscar a Alex, estaban desesperados, Tay iba manejando hasta que logro encontrar a Alex
-¿Qué haces en un bar? Todos estábamos preocupados
-tu eres un estúpido – Alex estaba algo borracha
-Si lo que digas – Tay trataba de llevársela
-Déjame aquí – Alex trataba de llevársela del bar
-No seas necia, vamos a casa
-debiste ser tu
- ¿ser yo que? – Tay estaba confundido
-debiste ser tú el que me dijera que me ama – Alex tenía las mejillas sonrosadas de la cantidad que había tomado
-Así que era eso – Tay estaba divertido por el estado de Alex
-Anda vámonos – Tay cargo a Alex, la subió al auto y decidió llamar a todos para avisarles que Alex estaba bien
Llego antes que todos, acostó a Alex y la contemplo con sus mejillas sonrosadas
-si supieras lo que siento por ti, perdóname por no decírtelo
Por fin llegaron todos, Nathan llego corriendo hacia Tay
- ¿está bien?
-sí, se le pasaron las copas así que está dormida
- pero ella nunca bebe
-Bueno, creo que tenía cosas que procesar
-no entiendo, ella…
-Nathan, déjala descansar – Kala intervino
- tienes razón
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más allá de las estrellas
Novela JuvenilAlex es una chica que siempre ha hecho lo que sus padres han querido pero tras la muerte de tu hermano debe tomar la decisión de tomar su propia vida, es entonces que toma una decisión que le cambiará la vida