[06]

746 69 7
                                    

Regresé a clase y todo había transcurrido con normalidad, claro, si no hubiese sido por la grata intensidad de Katsuki en saber que había pasado allá.

— No planeo rogarte, si quieres decirme bien —soltó con pesadez, chasquee mi lengua ante aquel gesto de "chantaje"

Yo solo alcé mis hombros sin importancia, no perdía nada si le decía o no — No te diré.

— ¡Maldita sea! ¡Nunca quieres decirme nada, joder!

Yo traté de ignorarlo y seguí caminando hasta su casa, no quería estar en la mía ya que se sentía vacía, pero sé que la suya igual estaba así pero al menos tendría su compañía.

Saqué mi teléfono y me dispuse a hablar con Mina, ella era una gran amiga y muy cercana.

» Vengo con Kats, Mina.

» ¿Con el amor de tu vida?
» Tú y él harían linda pareja, tienen casi el mismo temperamento, solo que tú un poquito más amargada.

» ¡Hey! pero yo no grito

» No negaste que harían linda pareja, eeeeh.

Ignoré lo último y lo mejor fue dejarla en visto, sé que si seguía con eso haría todo un caos en sí, hoy habíamos tenido una prueba para un campamento, y ella por mensa no pasó.

Una vez llegamos a casa de Katsuki, dejé mi mochila en el sofá, me tiré en este con total cansancio.

— Tonta, en mi habitación agarra ropa, y cámbiate. —ordenó al otro lado de la sala el rubio.

— Ahora voy —contesté cerrando mis ojos, hice un esfuerzo por levantarme y fui hasta su habitación.

Busqué entre su cajón y visualicé aquella playera que me gustaba, me quité el uniforme quedando solo en unas licras negras y me puse la camiseta, ahora estaba más fresca. Regresé a la sala encontrándome con Bakugō, mis pasos sonaron por aquella sala silenciosa, él se dio cuenta de mi presencia y me abarcó con su mirada, divagaba en mí, sus ojos tan penetrantes que enviaba descargas eléctricas por mi cuerpo.

Subió su mirada lentamente hasta mirarnos fijamente, yo era una persona cuyo carácter era tan distante y poco controlador, siempre estaba a la defensiva, y ninguna mirada me provocaba bajar la guardia de la mía.

Pero tan solo notar cuyos ojos carmesí, me volvían tan pequeña, me debilitaban de tal forma, y no entendía el porqué.

Carraspeé mi garganta, nuestro entorno se había vuelto tan tenso que me mantenía un poco incómoda que él no dijera ninguna palabra pero que si pareciese que me comía con la mirada.

Pero no existía razón de que tratase de lo que pensaba, Katsuki siempre era tan indiferente conmigo así yo con él.

Solo me hacía ideas, y no me debía preocupar por eso. Él y yo solo somos, y seremos amigos, nada más.

— ¿Se te perdió algo? —pregunté por fin, deshaciéndome de aquel tenso momento.

Él apartó su mirada y apretó su teléfono, negando.

— Nada de tu incumbencia.

Y de nuevo ese tono amargo, él era muy diferente conmigo, aunque había costado, cuando nos conocimos recuerdo que él se basaba en gritos cuando se dirigía a mí.

Pasaron los años y eso fue cambiando... o eso creo, sus comportamientos a veces eran raros, me miraba de una manera no común, y eso había sucedido hace dos años, en una noche donde su madre lo obligó en ir a una cena, y yo fui su acompañante.

𝐓𝐀𝐍  𝐂𝐄𝐑𝐂𝐀  𝐃𝐄  𝐓𝐈  -  𝐊atsuki 𝐁akugō x 𝐑eader Donde viven las historias. Descúbrelo ahora