Jisung sale a festejar su llegada a Corea con amigos y, por casualidad, se mete en líos al despertar entre sábanas junto a un hombre atractivo.
La complicación surge cuando descubre que su amante nocturno es alguien muy importante, obligándolo a lid...
─No te preocupes, mamá, iremos a comer algo y tomar unas cuantas copas. ─Su padre lo miró de reojo.
─No te preocupes cariño, el debería divertirse con sus amigos antes de asumir la responsabilidad de ser presidente, déjalo irse. ─Sonrió y Jisung asintió.
─Bien, cuídate. ─La mujer se despidió con una sonrisa al igual que su padre antes de retirarse en aquel gran vehículo.
Vio a Seungmin acercarse con un cigarro en los labios.
─Deja esa mierda, ve, te vas a morir. ─Habló Jisung mientras agarraba el cigarrillo, lo tiraba al suelo y lo pisaba para apagarlo.
─Ya pensaba apagarlo igual. ─Se encogió de hombros y metió sus manos en los bolsillos de sus pantalones de tela.
─Mis padres ya se fueron, ¿nos vamos? ─Jisung asintió.
─¿Trajiste tu carro? ─Seungmin lo miró con el entrecejo fruncido.
─¿Eh? Claro que no, por algo te iba a llamar. ─Jisung soltó un gran quejido.
─Pensé que tú habías venido en el tuyo, y… ─Jisung lo miró con una fulminante mirada y Seungmin se calló inmediatamente.
─No te preocupes, llamaré a mi chofer y le pediré que traiga mi camioneta. ─Jisung asintió y se cruzó de brazos con su mirada puesta en el asfalto de la carrera.
Un carro se detuvo frente a ambos y Seungmin alzó la mirada de su celular, al igual que Jisung.
El vidrio polarizado fue bajado mostrando a Minho asomándose por la ventana.
─¿Necesitan un aventón? ─Preguntó y Seungmin negó de inmediato.
─No es necesario, señor, ya estaba por llamar al chofer
─No se preocupen, suban
Jisung miró a Seungmin tratando de decirle que no con la mirada, pero Seungmin ni siquiera lo miró antes de abrir la puerta de atrás.
─Muchas gracias por llevarnos. ─Dijo Seungmin mientras subía.
─Sube. ─Le dijo el peli castaño a Jisung quien se limitó a hacer expresiones fáciles, no quería que Seungmin empezara a preguntar.
─Claro, muchas gracias. ─Dio una leve reverencia antes de acercarse a la puerta.
─¿Podría sentarse adelante? No quiero sentirme como un chofer. ─Sonrió y Seungmin cerró la puerta antes de que el rubio pudiera pronunciar una palabra.
─Ya oíste, anda adelante. ─Jisung apretó fuertemente sus labios antes de darle la vuelta al carro y sentarse en el asiento del copiloto.
Estaba rompiendo sus propias reglas, desde que cruzó una palabra con él ya lo había hecho, él nunca socializaba con sus amantes nocturnos fuera de ese contexto.
─Bien, ¿dónde los dejo?
─En el High bar. ─Respondió Seungmin y Jisung volteó a verlo.
─Y la carne? ─Preguntó en un hilo de voz.
─Otro día. ─Sonrió y Jisung solo suspiró y asintió.
Ahora que se ponía a pensar, aquel hombre lo había hecho firmar un contrato de confidencialidad y aún así estaba como si nada en el bar.
¡Hasta bailó con él frente a otras personas esa noche! ¿Piensa que ellos no diran nada? Cualquier rumor pudo correr al verlo bailando en un bar y después verlo irse con esa persona.
No tenía que ser él obligatoriamente quien "filtrara" algún tipo de rumor con él.
"Que contrato más inservible y estúpido." Era lo que Jisung pensaba después de tanto pensar en ello.
─Llegamos. ─Musitó Minho
─Se lo agradecemos mucho, señor, espero que no hayamos sido una molestia para usted.
Jisung realmente seguía sorprendiéndose con la actitud tan angelical que solía tomar en casos como estos, y con él solía ser tan imbécil.
─Gracias. ─Bajo levemente la cabeza antes de salir del auto y cerrar la puerta.
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Jisung estaba aburrido, no podía hablar con nadie al no ver a Seungmin por ninguna parte y estar él solo en la barra de la zona VIP.
─Esto ya había pasado.
¿Cómo le llamaban a ese sentimiento? Deja vu, eso es lo que sentía ahora mismo.
No tenía ganas de beber, así que estaba con un jugo de naranja entre sus manos, realmente se sentía extraño.
─Aj, yo me largo. ─Murmuró antes de bajarse de la silla e irse de la zona.
Salió completamente de aquel bar y soltó un suspiro.
─Ahora...taxi.
Caminó un poco pero todos los taxis que pasaban por el lugar iban llenos de gente, y no había uno que estuviera vacío para él.
─Seungmin, maldito, no vuelvo a salira beber contigo. ─Musitó mientras sacaba su celular para ver la hora.
Eran pasadas las dos, seguramente su chofer estaría dormido.
Levantó la mirada y vio un vehículo similar al que los había traído al bar, estacionado en la calle del frente.
─Estoy loco. ─Susurró antes de ver como la ventana bajaba revelando a Minho dentro del carro.
Jisung suspiró y simplemente asintió, de todas maneras pensaba irse, es un Uber gratis.
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