ALESSIA
Por más que lo intento, no hay manera. Dalila no termina de caerme bien. Lleva apenas dos días en el pueblo y ya actúa como si fuera la dueña de todo. Es verdad que en cierto modo es bonita, pero vamos, no es como si fuera la propia Afrodita descendida del Olimpo.
Narciso ha intentado que nos hagamos amigas, pero ninguna de nosotras está dispuesta a ceder. No causé una buena primera impresión, y su manera de ser no me resulta agradable.
-¿Cómo es posible que alguien actúe de esa manera en tan poco tiempo?
-¿Me decías algo, amor? ¿Hay algún problema?
- No te preocupes, amor, solo estaba pensando en voz alta. Se que intentas que tu prima y yo nos llevemos bien, y entiendo que es lo que quieres, pero realmente no quiero estar en la cafetería con ella en este momento.
No me gusto el hecho de que intentara invitarnos a tomar algo a las dos para llevarnos bien, especialmente porque se suponía que seríamos solo nosotros dos. Últimamente, ha sido todo sobre Dalila, siempre Dalila.
-Amor, por favor, no te vayas. Te prometo que es la última vez que sucede, solo intento asegurarme de que mi prima tenga una buena estancia mientras está aquí. Pronto, cuando yo vuelva a viajar, ella ya no estará.
- Espera, ¿a qué te refieres con "cuando vuelvas a viajar"?
- Chicos, tengo ganas de un postre, ¿qué tal si comemos algo dulce?
Por supuesto, Dalila tenía que arruinar el momento, aunque a Narciso pareció gustarle que ella interviniera. El hecho de que se vaya de viaje otra vez es algo que no habíamos discutido previamente, y enterarme como si fuera un error en la conversación, definitivamente no es normal.
Con toda la confianza que se supone que existe entre nosotros, y aún así... aparecen secretos y sorpresas de la nada. Narciso está a punto de levantarse pero...
-Amor, necesitamos hablar de esto, creo que es importante que lo hablemos ¿podríamos salir a conversar, por favor?
-Hablaremos de eso más tarde en casa.
Y así se fue, sin más. Me quedo mirando cómo elige un postre con su prima; entiendo que tengan una relación cercana, su hermano ya me dijo el día de la fiesta que los tres se consideran como hermanos, pero aún así, creo que no son maneras de comportarse.
Pues si no quiere hablar, no lo haremos. Me levanté de la mesa mientras ninguno de los dos miraba y me alejé de allí. Sentía ganas de llorar, pero realmente no sabía por qué.
Salgo de la cafetería sin mucho muchas ganas de regresar a casa, así que opto por pasear por el parque para pasar el tiempo. Y en cierto modo lo logro.
Pasa una hora, luego dos, dos horas y media... y pierdo la noción del tiempo hasta que suena mi teléfono. La llamada es de un número desconocido y justo cuando voy a responder, se corta. Esa llamada interrumpida me hace darme cuenta de que han pasado horas desde que salí de la cafetería y no he recibido ni una sola llamada o mensaje de Narciso.
Eso me irrita más que ponerme triste. Ha pasado mucho tiempo y ni siquiera ha mostrado signos de preocupación. Decido regresar a casa, pero en el camino, tengo la sensación de que alguien me está observando.
Presiento que algo me observa desde el bosque, lo cual me pone bastante incómoda. Inconscientemente, detengo mi paso al intensificarse la sensación de ser vigilada. Me quedo contemplando el bosque hasta que finalmente lo veo.
No sé cómo explicarlo, pero puedo percibir a una persona. Creo que es un hombre, alto y en buena forma física, pero no puedo identificar quién es. Lleva puesta una capucha, y los pequeños rayos de sol solo me permiten ver sus ojos...
SUS OJOS... son los mismos ojos grises que vi el día de la fiesta. Quiero acercarme para hablar con él, no parece tener la intención de irse.
De repente, recibo una llamada. Echo un vistazo rápido al móvil y justo después escucho como crujen las ramas, observando cómo la persona desconocida se aleja lentamente. No me atrevo a seguirle bosque adentro, así que permito que se marche mientras decido contestar la llamada.
- ¿Hola? ¿Quién llama?
-¿Cómo que quién llama? ¿No reconoces el número de tu madre?
-¡Ay, mamá, perdona! Estaba distraída y no vi quién llamaba.
-Claro que sí, ¿dónde te has metido? Es muy tarde, regresa a casa inmediatamente. Narciso dice que te fuiste hace horas sin avisar.
Es verdad, olvidé el motivo por el cual había llegado hasta aquí. Mi madre no esperó más, colgó y sin más, me dirigí hacia casa. Eché un último vistazo al bosque por donde se había ido ese chico misterioso.
Mientras volvía a casa, me puse a reflexionar. La persona no puede ser del pueblo; nadie ha pasado por ahí en años. Dudo que alguien que entre encuentre algo, ya que no hay nada al otro lado.
Los pueblos están situados a este lado del bosque, mientras que la ciudad se encuentra muy lejos de aquí, especialmente del bosque. ¿Quién en su sano juicio entraría al bosque?
No es un bosque encantado, sino uno hermoso que, aunque a veces puede resultar espeluznante, esto se debe más que nada a las leyendas que nos narraban cuando éramos pequeños, y no a algo real, por supuesto.
Minutos después, llego a casa. Estoy cansada de tanto caminar y aún llevo la intriga de todo lo que ha sucedido hoy.
Mi madre está en la cocina preparando la cena.
Entro y comienzo a hablar con ella. La conversación se desarrolla con ella preguntando y yo respondiendo... ¿Dónde has estado? ¿Qué te ha pasado? ¿Por qué no has llamado? ¿Por qué te fuiste así?
-Mamá, lo siento, no quería discutir. Me sentí muy incómoda con la prima de Narciso y, además, él no había considerado siquiera contarme que planeaba viajar de nuevo. Lo peor es que me trató como si no quisiera hablar conmigo al respecto. Sentí como si estuviera evitando el tema conmigo, y eso es raro entre nosotros.
-No sé qué está pasando, mamá, pero he notado que Narciso ha cambiado desde que regresó de su año sabático y más aún desde que está su prima; las cosas no son como antes.
-Mi amor, es normal que las cosas vayan cambiando, y que se vaya de viaje o lo de su prima no debería hacer que os distanciéis. Aunque creo que exageras, mi niña.
-Quizás mamá, quizás...
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Elijo matar
Misterio / SuspensoUn asesino ... un misterio ... ¿un amor? Alessia debe sobrellevar la muerte de su novio. Alessia necesita saber quien podría desear matar al mejor chico del pueblo. ¿Un nuevo vecino en el pueblo? Sospechoso. Alessia, piensa, que paso esa noche ¿Te h...