Odio ir con uniforme, porque no solamente cambian el reglamento y podemos ir como se nos plazca. Sinceramente, estoy harta de llevar lo mismo todos los días. Blusa blanca cuello redondo, chaqueta azul con la insignia del colegio, la corbata azul, falda gris tableada, medias grises, zapatos negros.
Si fuera directora cambiaría el reglamento, diría que pueden venir hasta con la ropa que duermen.
—Bárbara, hermana querida e hija de Dios —me volteo a ver a mi hermana parada en el marco de la puerta de mi habitación —tu sabes que te quiero mucho...
—Si. Solo lo dices cuando quieres un favor, Rebeca —me siento en la cama para ponerme los calcetines.
—Eso es un sí. Mamá no lavó mis calcetines, quería que me prestes un par, ¿puedes?
—Puedo, pero no lo haré.
—Oye, pensé que éramos como los Mikaelson. Cuando un hermano de verdad quiere el favor se lo hace, así sea renegando. Yo sé que a veces eres como Niklaus, pero de verdad necesito esos calcetines. Le puedo decir a Maikel o rogar que haga lo que quieras, sabes que solo me escucha a mí. Y justo tu colegio lleva los mismos calcetines que las mías.
—Tu solo piensas eso, deberías dejar de ver esas series —susurro para mí.
Respiro hondo con el pensamiento de que se vaya, pero no lo hace.
—Hare que Maikel no le cuente a madre de que te escapaste con tus amiguitas del colegio para irte....
—Está bien —me levanto para ir a mi armario y sacar un par— Toma, —se las tiro — ahora largo.
—Pero si estas son mías —frunce el ceño.
Alzo mis cejas señalando la puerta para que se vaya.
No sé si es lindo tener hermanos. Por suerte solo tengo dos. Yo soy la mayor de 18 años. Maikel de 17 y Rebeca de 16. Si, somos seguidos y es por eso que a veces nos escondemos las locuras que hacemos, pero también a veces se nos escapan. Aunque tenemos el duro sufrimiento de que si se te escapa algo debes pagarlo, y es que tienes que hacer todo lo que te diga el otro hasta que se canse, y si no resistes.... espera que todos tus secretos incluso hasta el más tonto sean escuchado por tu madre.
Mi hermano y yo estamos en el mismo curso, pero en colegios diferente. Mamá realmente no se enteró de lo que verdaderamente ocurrió, este suceso de nuestro colegio anterior es nuestro mayor secreto.
Bajo para desayunar y los veo a todos en la mesa, mis padres y hermanos.
—Buenos días a todos y buen provecho —saludo y tomo asiento, junto a Rebeca.
—Buenos días —respondieron todos, menos mi padre que estaba enfocado en su periódico mañanero.
Al terminar el desayuno nos despedimos de nuestros padres y caminamos para ir a la parada del autobús. Cada uno se iba en diferentes.
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Susurros del Destino
RomanceNora tendra que invitar a Liam Brown, el chico mas conocido por el instituto. Todo esto sucede por una apuesta con su hermano, Nora no la tendra facil, ya que por un motivo de ira comete un error. Del odio viene el amor, pero ella asegura que el am...