ッᝍ 𝗩𝗶𝗮𝗴𝗿𝗮 • ꒰ hyunin ꒱

¡ onze !

—¿Y qué tal?

Una pausa.

—¿Rico?

El pelinegro miró al chico pálido a su lado que le miraba emocionado como si hubiera hecho el mejor descubrimiento del mundo.

—Min, es una mandarina.

—Sí, sí. Pero-

Jeongin rápidamente metió un gajo de mandarina en la pequeña boca de Minho que fue interrumpido, obligándose a masticar de aquel cítrico el cual era su favorito.

—Es temporada de mandarinas, son deliciosas, Innie.

—Sí, Min, pero me prometiste un delicioso desayuno. Esperaba unos hotcakes, leche con chocolate.

—Bueno, podemos hacerlo otro día, ¿qué te parece mañana?

Desde aquella vez en la cafetería han estado recurriendo a ambas casas antes de la escuela y después de la escuela. Ha pasado ya una semana de aquello. Hoy viernes es donde más Jeongin ve a Hyunjin, debido a sus clases y talleres opcionales. Estaba un poco nervioso por aquello, pero trataba de relajarse tal como le ayudaba Jeongin.

>> Flashback.

Sollozos y un cuerpo tembloroso yacía en la esquina de aquel salón de música donde estaban Minho y Jeongin en la hora del receso, luego de Jeongin haber visto cómo Hyunjin tomaba a Aisha para dejarle un chupetón en el cuello, justamente cuando el pelinegro estaba formado para comprar algo en la cafetería de la escuela.

—Jeong ¿Todo esto es por Hyunjin?

El menor no respondía y sólo seguía inmerso en sus pensamientos, recordando aquella escena. La forma en la que Hyunjin le miraba, mientras le hacía aquello a Aisha, queriendo demostrar que Hyunjin estaba demasiado bien sin Jeongin, como si no hubiese valido nada su amistad, por lo menos eso. Aceptaba su error por el viagra y su calentura, pero había más.

Unas manos cálidas y grandes, tomaban con cuidado el rostro del menor. logrando que Jeongin volviera en sí, manteniendo los sollozos, pero ya sin pensamientos que le aturdieran. Minho pareciera ser alguien frío, pero sus manos, su forma de ser y de mirar eran bastante cálidas, Jeongin era el que podía comprobarlo. Se encontraban bastante cerca. Rostro a rostro. Minho de cuclillas y Jeongin sentado abrazado de sus piernas. Sus ojos se cruzaron, manteniéndose la mirada unos largos segundos.

—Innie, puedes hablarlo conmigo.

El nombrado sólo mantuvo su mirada en el chico pálido frente a él, reduciendo lo rápido que respiraba. Apretó sus labios en señal de temor en si hablar de todo, incluyendo que drogó a su amigo para saciar aquellos deseos sexuales que tenía con él.

—Es sobre Hyunjin ¿Verdad? —volvió a preguntar el mayor

—Sí, era mi mejor amigo y pasaron muchas cosas —hizo una pausa, buscando las palabras correctas para expresarse —. Al final no terminó como yo esperaba, pero es todo por mi culpa.

—En situaciones de dos, la culpa es de ambos — mencionó Minho, retumbando esto en la cabeza de Jeongin, que le hizo estar aún más calmado. —¿Puedo saber qué sucedió?

—Supongo que puedo confiar en ti —dejó soltar un suspiro pesado. Jeongin se hizo a un lado para no incomodar a Jeongin —. Soy homosexual —continuó hablando, desviando su mirada para evitar ver la reacción de Minho —, comenzó a gustarme Hyunjin, que fue mi amigo desde secundaria. La forma en mostrarle que me gustaba estuvo mal — pronto un color rojizo se pintó en sus mejillas al recordar la primera vez que se atrevió a ponerle aquella pastilla azul en el agua —, pero creía que iba a corresponderme, porque comenzaba a actuar como quería, sólo que me daba un poco de miedo a veces. No todo fue como creí, a Hyunjin no le gustaba, sólo me usaba y sí, sé que fue por mi culpa soltó un suspiro y recordaba las anteriores palabras de Minho —, la de ambos, pero si hubiera hablado mis sentimientos, sería diferente o quién sabe. Hyunjin no es gay como yo...