Capitulo I

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Mucho tiempo atrás:

Unas gotas de lluvia empezaban a descender del pálido cielo acompañaban las lágrimas de un rubio que estaba de luto, las lágrimas  se camuflaban entre las gotas de lluvia, por un ser amado que había partido de este mundo.

- Mamá no te vayas, no me dejes sola, mamá, por favor abre los ojos- la voz de una pequeña peli negra decía llorando entre sollozos

El rubio se acerco a ella, se acomodo  un poco para posteriormente ponerse en cuclillas, la tomo de sus hombros para mirar sus ojos azules, los contempló unos segundos, mientras más lágrimas salían de sus ojos y la reconfortaba en un suave y cálido abrazo, sobaba su espalda y dijo- A mi también me duele mucho, pero está en un lugar mejor, aveces la vida es así te quita lo que más quieres, pero debemos aprender a hacer fuertes - decia con la voz quebrada en susurro de la oreja de la pequeña

Los días transcurrían con normalidad, todo era alegre en la ciudad, excepto en un lugar en la casa de Reigen Aragata, la tristeza se podía escuchar por toda la casa con ese silencio que inquietaba, todo estaba obscuro, un lugar melancólico y sombrío.

- Hijo ya pasaron algunos días, tiene que salir y disfrutar un poco el Sol, las ojeras que tienes se ven peor con ojos hinchados que tienes, se que es difícil para tí pero, la vida sigue, a mí también me duele mucho el corazón, me pongo a pensar que no le hubiera gustado que estemos de esa forma -
Dijo una Alfa de tercera edad rubia con un poco de tristeza al ver cómo su hijo se aferraba tanto a la persona que hace días dejó este mundo

- Lo sé mamá, tengo que luchar por mi y por ella- señaló a la pequeña que se le había hido el alma de tanta tristeza, con unas marcas de lágrimas recientes y otras de hace horas, que ahora estaba ocupando el sofá mientras tenía su vista perdida en el suelo

- En unas semanas regresaré al hotel para ocuparme de el nuevamente - suspiro, pensando si decirle o no - Reigen hay algo de lo que quiero hablar contigo- La madre Alfa poso su vista a dónde estaba el rubio para después proseguir - Mira, se que lo que te voy a decir a continuación no te guste pero...- tomo aire  para después proseguir -cuando estábamos en el funeral, él se apareció -

Al escuchar ésto el rubio abrió los ojos como platos -¿Qué te dijo? ¿Te hizo algo? ¿Te amenazó? Supongo que quiere algo de nosotros - dijo el rubio con de preocupación liberado hormonas de enojo

- Me dijo que él solo hiba a despedirse de tu hermana, ya que era la persona que lo había hecho enorgullecer- La madre respondió - después del entierro solo se fue-

- Me hubieras dicho para partirle su cara - respondió el rubio molesto, cada vez que escuchaba sobre Él, le daba asco, y mejor prefería evitar hablar de el y pronunciar su nombre, hace mucho que no escuchaba nada de él, por qué tanto como él y el rubio se habían dado por muertos entre ellos

- Sabía que harías y dirías eso, haci que era mejor contarte lo a qué hicieras algo sin pensarlo en el funeral de tu hermana- dijo frunciendo el ceño

- Ella estaría feliz si le hubiera dado  un golpe y sacarlo de su funeral, además el nos hizo sufrir mucho- mientras recordaba algunas ocasiones donde estaba llorando de tanto que lo hizo sufrir.

- Reigen no es bueno guardar rencor, solo por eso no has podido conseguir pareja - la madre se dió cuenta de las palabras que dijo -Disculpa hijo pero creo que ya es tiempo de darme más nietos, sabes es mejor ser feliz a qué cargar recuerdos del ayer, con el tiempo te arrepientes de no vivir tu vid, desde que tú te fuiste de la casa reconozco que eres muy trabajador, incluso si el algún día se entera de lo que tienes te va a apreciar, hay que ser precavido también-

- Si mamá lo tendré en cuenta, solo que aún no quiero juntarme, tengo más responsabilidades que cumplir y eso are, trataré de ser feliz a lado de mi sobrina - dijo el rubio mientras veía a la pequeña

-Le prometí a mi hermana que la cuidaría y lo cumpliré - sonrió el rubio

Te Amo Shishou ( Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora