¿¡𝗣𝗿𝗲𝗺𝗶𝗼 𝗱𝗼𝗯𝗹𝗲!?/𝘔𝘶𝘪𝘵𝘢𝘯

¿No eres una chica?

(𝗧𝗮𝗻𝗷𝗶𝗿𝗼)

Horas después, las clases al fin terminaron al ser el primer día nuestras clases no fueron muy pesadas, por eso ahora todos salíamos del salón con energía.

-Y es por eso que deberías dejarme estar con tu hermana.- Finalizó Zenitsu su irrelevante explicación.

No lo escuché y tampoco me importaba, no había fuerza en esta tierra que fuera capaz de hacer que le permita estar con mi hermana menor.

Por otro lado, todos estábamos caminando hacia la salida, habíamos logrado hacernos amigos de Tokito, quién ahora se encontraba riendo bajo por el drama de Zenitsu, además Genya y Inosuke que iban discutiendo porque el Hashibira hablo mal del hermano mayor del Shinazugawa argumentando que es un tonto por hacerlo quedar como un tonto. Yo solo observaba todo el panorama desde atrás.

En eso llegamos a la salida y seguimos caminando hasta que Sanemi, el hermano mayor de Genya apareció para recogerlo y se fueron. Seguimos caminando los cuatro pero eventualmente no separamos y cada quien siguió su camino.

Ahora iba a buscar a Nezuko a la escuela. Cuando llegué la vi parada frente a la puerta con otras dos chicas, Kanao y Aoi, eran amigas de Nezuko.

-Hola.- Al llegar donde las chicas estaban las saludé tranquilamente mientras sonreía.

-¡Onii-chan!- Nezuko me abrazó felizmente.

-Hola Tanjiro-Kun.-

-Hola.- Las demas chicas también me saludaron.

Deje que Nezuko se despidiera y nos fuimos.

Al llegar a casa subí a mi cuarto para bañarme y cambiarme de ropa, Nezuko se quedó en la sala viendo en la tele su programa favorito.

¡Toc toc!

Ni bien terminaba de cambiarme cuando la puerta sonó.

-¡Yo voy!- Dije bajando las escaleras.-Nezuko, ve a bañarte.- Llegué hasta la puerta luego de decir eso.

Nezuko asintió y se fue. Abrí la puerta y no me sorprendió ver a la señorita Mitsuri detrás.

-¡Hola, Joven Kamado! ¿Como estás?- La enérgica peli-rosa-verde se asomo un poco con una gran sonrisa.

La señorita Kanroji era la maestra de gimnasia de Nezuko y también mi vecina, siempre era muy buena conmigo y mi hermana, Nezuko la quería mucho.

-¡Buenas tardes señorita Kanroji! Pase.-Ella entró y pude ver que tenía una canasta en las manos.

-No voy a quedarme mucho, pero ¡Mira!- Me mostró la canasta con entusiasmo.- Hice panqueques y como se que a Nezuko le gustan vine a traer un poco.- Sonrió entregándome la canasta con panqueques.

-¡Muchas gracias señorita! Estoy seguro de que Nezuko estará feliz.- Sonreí mientras tomaba la canastita.

En eso bajo Nezuko y cuando la vio la abrazo.

-Hola Señorita Kanroji.- Nezuko la saludo con una sonrisa.

-Hola Nezuko, es un gusto verte.-empezó a acariciar su cabello.- Lamento que ya me tenga que ir.- Cuando dijo de eso Nezuko la soltó algo desanimada.

Nos despedimos de la peli-rosa-verde cuando se iba. Yo llevé los panqueques a la cocina para servirlos mientras Nezuko esperaba emocionada.

-Listo Nezuko, aquí tienes.- le entregué un plato y comenzó a comer, yo también comí.

A Nezuko le encantaban los panqueques de la señorita Mitsuri y a mí también. En cuanto terminamos me dispuse a lavar los platos y Nezuko se fue a su cuarto a hacer quien sabe que cosa, pero probablemente jugando con su tablet. Yo decidí hacer lo mismo y me fui a mi cuarto, tenía tareas que hacer.