The thinker

Capítulo 64 - Cena familiar I

"Necesitas calmarte, Kat. Conoceré tus padres, no los tomaré como rehenes".

Los dos estaban caminando hacia la puerta de la casa del rubio; Katsuki tenía las manos metidas en los bolsillos y parecía que estaba tratando de esconder su cuello como una tortuga. Ella lo conocía lo suficientemente bien como para saber que la emoción que sentía era pánico.

"Vete a la mierda", se quejó. "Mis padres son solo... ellos solo... simplemente no te asustes si son estúpidamente raros".

_______ se rio. "No pueden ser tan malos". Se acercó al muro y tocó el timbre. "He tratado con villanos, qué podría salir..."

Antes de que pudiera terminar su frase, la puerta se abrió y reveló a una Mitsuki demasiado entusiasta con los brazos abiertos. "¡YA ESTÁN AQUÍ!" gritó, extendiendo la mano y agarrando a los dos por los brazos para meterlos en la casa. "¡Me alegro mucho de que estés aquí! Una parte de mi pensaba que este chico se acobardaría y escaparía..."

"¡Nunca me acobardo de nada!" Bakugo interrumpió.

"Cállate, Katsuki. Ve a ayudar a tu padre con la cena. _______ y yo tenemos una conversación pendiente". Sin otra palabra, tomó el brazo de _______ de nuevo y la llevó al comedor. _______ le guiñó un ojo a Katsuki antes de desaparecer detrás del marco de la puerta.

Ya no estaba sintiendo pánico. Ahora era miedo.

Se quitó la chaqueta y la colgó en el armario de abrigos antes de quitarse los zapatos para unirse a su padre en la cocina. Masaru estaba de pie sobre la estufa con una espátula y una sartén, el olor a carne jugosa se extendía por la habitación. El estómago de Katsuki gruñó.

"¡Ah, estás aquí! Bienvenido a casa, hijo", dijo su padre con dulzura. Se dio la vuelta y le dio un cálido abrazo a Katsuki antes de volver a su tarea en la estufa. "Tu madre y yo pensamos que podría ser divertido hacer un platillo americano esta noche para tu novia, ¡así que estamos haciendo hamburguesas!"

Katsuki trató de no sentir pena.

"Aquí, mira estos cortes. Voy a tomar los tomates del refri", dijo Masaru mientras entregaba la espátula.

Katsuki la tomó y comprobó el progreso de la carne. Su padre siempre había sido el cocinero de la casa y de donde había aprendido la mayoría de sus habilidades. Había crecido con las recetas de su padre. Aunque la elección de comida era vergonzosa, ciertamente olía celestial.

Se dio cuenta de que estaba tratando de distraerse del miedo a lo que su madre y _______ podrían estar hablando en la otra habitación. Cada momento humillante de su vida parecía aparecer en la parte delantera de su mente.

***

"¡Ven y siéntate!" Ordenó Mitsuki.

Las dos se sentaron en la mesa del comedor; Mitsuki apoyó su barbilla en sus manos y se inclinó hacia _______. "Dios, es maravilloso conocerte. Nunca pensé que vería el día en que Katsuki trajera a alguien a casa para cenar".

_______ rio. "Seré honesta, también me tomó por sorpresa", admitió. "Pensé que me diría que se estaba muriendo por cómo me invitó. Apenas lo logró".

"Ese chico tonto", gruñó Mitsuki. "Bueno, al menos lo hizo. ¿Cómo se conocieron? No nos cuenta nada, apenas puedo sacarle una palabra".

_______ movió los dedos nerviosamente. " Vine a Japón después de perder mi quirk. Estaba siendo buscada por un gran villano de mierda..." Ella llevó su mano sobre su boca después de darse cuenta de su vulgaridad. "Dios mío, lo siento mucho, se me escapó..."

Pero Mitsuki estaba encorvada sobre la mesa de risa. La cara de _______ ardió en vergüenza cuando la madre de Bakugo se encontró con sus ojos y dijo: "Veo por qué le gustas".