Capítulo 4[ Pacto Aceptado]

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Estaba bastante perdida por lo que le ofreció aquel extraño sujeto, era demasiado tentador a costa de algo que no estaba segura de dar. Ya había dicho que sus padres se habían negado a aceptar aunque si le vendría bien el dinero y más por que podrían salir a flote de una manera rápida.

Tsuyu- Ochako-chan estás bien? kero- en todo el día su mejor amiga se veía totalmente perdida

Ochako- eh? Si si estoy bien Tsu-chan todo es perfecto- sonrió a su amiga que no se veía muy convencida

Iida- te ves bastante perdida, sucedió algo en estos días? - la castaña pareció nerviosa pensando en que responder

Tsuyu- Ochako-chan? - la castaña en verdad se veía sumamente distraída

Ochako- yo... - tenía que pensar bien sus palabras- la verdad me están ofreciendo un trato bastante impresionante que resolvería gran parte de los problemas económicos de mis padres pero tengo que hacer algo de lo que no estoy muy de acuerdo... - no quería decir todo pero era un muy buen resumen de las cosas

Iida- te ofrecieron un trabajo?- la castaña se silenció un momento poniendo tensos a sus amigos

Ochako- si... Algo por el estilo... No es cómo tal un trabajo pero si es similar... - no había pensado en la posibilidad de considerarlo trabajo dado que no le fue mostrado de tal manera

Tsuyu- no entiendo mucho Ochako-chan kero- la castaña soltó un suspiro irritada

Ochako- quien me ofreció el dinero dijo que tenía que estar al servicio de su hijo y no se si aceptarlo... - no quería decir más sin saber cómo reaccionarian sus amigos

Iida- quieres decir ser su guardaespaldas? Cómo un trabajo a tiempo completo? - no terminaban de entender y su amiga no les culpaba de ello

Ochako- si, digamos que si- no quería alargar más las cosas o complicarlas más de lo necesario

Tsuyu- entonces te piden ser guardaespaldas de un niño dejando todo en UA?! - habló con algo de miedo

Ochako- no tan así! Aun podría venir a UA pero siento que hay más cosas que no me están diciendo... - y muchas que no les podía decir a sus amigos

Iida- entonces no veo dónde está el problema, sinceramente ser un guardaespaldas no es tan malo y a menos que sea un niño menor a cuatro años dudo que sea algo tan tedioso y no eres mala con los niños por lo que sería una buena opción de dinero, te reconocen bastante tu fuerza para proteger a alguien importante- la castaña soltó un suspiro, no era exactamente lo que necesitaba escuchar

Tsuyu- tu que quieres Ochako-chan... - la castaña bajó la mirada confusa

Ochako- no lo sé... Es una gran oportunidad para ayudar a mamá y a papá pero.. - soltó un suspiro- tengo algo de miedo...

Iida-... - el peliazul puso un brazo sobre el hombro de la chica- siempre has sabido salir de las peores situaciones, lo demostraste mucho a lo largo de este año y el año pasado, se que hay cosas que no estás dispuesta a decirnos pero confío en que harás lo que consideres lo mejor tanto para ti cómo para tus padres- sonrió a la chica la cual asintió

Tsuyu- eligas lo que eligas somos tus amigos kero- la castaña asintió a la ranita mucho más tranquila

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Tenía la cabeza llena de dudas, tanto de si aceptaba cómo si no. La principal era de cómo sería su "esposo" y cómo llevaría una vida junto a él, si quiera era alguien que le es atractivo? Sabía que tenían la misma edad pero nada más, eso la llenaba de mucho miedo y dudas bastante razonables.

Por otro lado si negaba esta oferta las cosas iban ir a peor, sus padres no le decían por miedo a que Ochako se preocupara pero era demasiado obvio para ella que estaban en demasiados problemas financieros muchos más de los que estaban dispuestos a reconocerle, no estaban tan lejos de la bancarrota y eso sinceramente le aterraba.

Las palabras de su amigo vinieron a su mente mientras sostenía la tarjeta que podía cambiar su destino, estaba indecisa y desesperada. Pensaba mucho en los contras y nada de lo bueno que pudiera pasar, quizá su esposo no era desagradable ni alguien incómodo de tratar, quizá incluso resulta que aquella vida le gustaba y cómo bien le habían dicho ni siquiera era necesario que tuvieran descendientes y sólo debían superar la prueba del año que dijo el sujeto, no sonaba para tanto, quizá simplemente sus miedos la estaban dominando...

Ochako- no lo sé... - miró su teléfono a su lado dudando más- quizá mamá y papá no, estén tan mal... - de un rápido movimiento llamó a su madre esperando convencerse

- Chako que alegría que llames! - su padre respondió con la voz bastante nerviosa, una mala señal, sólo usaba esa voz cuando le mentía, desde hace años lo había descubierto lo cual trajo algo de incertidumbre a su cuerpo

Ochako- hola papá... - habló con toda la dulzura posible, tratando de mantenerse fuerte- llamaba para saber cómo iban las cosas...

- oh... Todo genial! Todo va bien cariño, el trabajo nos tiene ocupados, todo va genial... - el hombre trataba de no venirse abajo pero le era muy difícil

Ochako- me alegra escucharlo... - habló con miedo- y dónde está mamá? - su padre no respondió- papá?

- lo cierto es que... - soltó un suspiro bastante pesado, una mala, señal- estamos en el hospital... Tu madre tuvo un ataque en la cocina....- no podía seguir mintiendole a su niña- las cosas no van bien Chako... Hace semanas que no tengo un contrato decente, tu madre está muy preocupada por las facturas y al fin ese estrés le hizo colapsar... Ya no se que hacer... Ni siquiera se cómo pagar el hospital pero te prometo que lo resolveré, no te preocupes por ella si? Yo me encargo de todo tu sólo sigue enfocada- trataba de sonar cómo el padre de siempre pero su voz comenzaba a romperse- chako?

Ochako- descuida papá entiendo... - temblaba de miedo al pensar en su madre ahora mismo, las cosas no iban para nada bien- por favor cuida a mamá si? Tengo tarea que hacer así que hablamos luego- sin dejar hablar a su padre colgó al borde de las lágrimas- mamá... - estaba hiperventilando pero sabía que hacer, con determinación tomó la tarjeta y comenzó a marcar el número en ella, tensa esperó a que alguien contestara aterrada de no haber sido rápida con su decisión

Hisashi- si diga? - la voz del hombre la tensó un poco, no sabía que decir

Ochako- s.... señor Midoriya soy Uraraka Ochako... - comenzó nerviosa sintiendo un nudo en su garganta

Hisashi- oh joven Uraraka que alegría escucharla- para contraste de la situación el sujeto se le encontraba sumamente animado- asumo que su llamada es por nuestro pequeño trato si es que puedo decirle así

Ochako- así es... - miró al suelo con nervios- aún está dispuesto a dar su dinero para ayudarme?

Hisashi- seguro, cómo ya le había dicho usted es la única chica que mi hijo quiere, en un par de semanas es imposible sacarla de su mente - era buena señal para ella- ya tiene una respuesta al acuerdo?

Ochako- así es... - cerró los ojos con miedo de su futuro pero no había marcha atrás, la situación lo ameritaba- me alegraría ser la esposa de su hijo....

Hisashi- oh.... - estaba claro que no era la respuesta que el esperaba- pasó algo no es cierto? - la castaña abrió los ojos sorprendida

Ochako- si... Mamá ingresó al hospital, un ataque de estrés... - apretó el teléfono con miedo a ser rechazada

Hisashi- entiendo... Lo lamento mucho, no debe ser fácil... - habló con bastante tristeza- descuida joven Uraraka yo me encargo de las facturas y tu te encargas de la felicidad de mi muchacho, tus padres no sufrirán por ello nunca más- aseguró con firmeza

Ochako- gracias... - habló un poco más tranquila, sentía una carga fuera de sus hombros

casada con un Yakuza Donde viven las historias. Descúbrelo ahora